El centro para adultos mayores en Hollywood, Florida, no contaba con planta eléctrica y, al cortarse la electricidad por el huracán, el lugar se quedó sin aire acondicionado. La istración del asilo no trasladó a los ancianos a un hospital, sino que los dejaron allí y utilizaron ventiladores para bajar la temperatura. 12 ancianos murieron. Ahora, varios empleados son acusados de homicidio involuntario.