Una situación extrema durante la siesta de la tarde de la pequeña Anastasia, de casi 3 años, hizo que su madre, Jennifer Abma, de Edmonton, Canadá, enviase una alerta a todos los padres acerca de los peligros que dejar que los niños duerman en ambientes poco ventilados. Conocida como golpe de calor, la situación genera una perturbación en el organismo causada por el calor excesivo en ambientes húmedos y con falta de ventilación.