El tiempo pasa y la vejez nos llega a todos. Estamos envejeciendo a cada instante, lentamente el cuerpo comienza a sentirlo y, en mayor o en menor medida, lo hace notar con groseros cambios en nuestra apariencia. Es de lo más natural, pero la piel se deteriora, pudiendo aparecer manchas, arrugas y varios otros cambios que, entre otras cosas, afectan la calidad de los tatuajes. Para muchos de quienes llevamos tatuajes en la piel, éste tema puede resultar muy interesante, quizás no tanto hoy o mañana, pero en algún momento la cuestión surgirá, así que hablemos sobre los tatuajes y el envejecimiento.