El duro interrogatorio en el Senado que enfrentó Pete Hegseth, el elegido de Trump para el Pentágono
El candidato a secretario de Defensa del presidente electo Donald Trump, Pete Hegseth, compareció públicamente ante el Senado por primera vez, tras semanas de cuestionamientos por parte de los demócratas y elogios de los republicanos por su perfil “no convencional”.
Hegseth es un veterano de combate y expresentador de noticias de Fox, se ha definido como un “agente de cambio” y un “guerrero” para el Departamento de Defensa. Algunos republicanos —aunque más en voz baja— también critican el perfil de Hegseth, que arrastra denuncias sobre conductas sexuales inapropiadas y ninguna experiencia en puestos como el que se le ha nominado.
Los demócratas han expresado preocupaciones sobre su falta de experiencia en altos cargos, sus comentarios polémicos sobre las mujeres y las tropas afroamericanas, y acusaciones de consumo excesivo de alcohol y conducta sexual inapropiada, calificándolo como no apto para el cargo.
Los republicanos en general han dicho que esperan un liderazgo más fuerte en el Pentágono. El presidente del Comité de Servicios Armados del Senado (que este martes interrogó al nominado), Roger Wicker (republicano de Mississippi), describió la nominación de Hegseth como “no convencional” y la comparó con la nominación del mismo Trump, sugiriendo que podría convertirlo ser, por eso mismo, una “excelente elección”.
Por otro lado, el senador Jack Reed (demócrata de Rhode Island), demócrata de mayor rango en el comité, criticó la idoneidad de Hegseth, afirmando que carece del “carácter y la competencia” necesarios para liderar el Pentágono. Reed, quien ha votado a favor de confirmar a los nueve últimos Secretarios de Defensa, incluidos los del primer mandato de Trump, anunció que no apoyará a Hegseth, calificando su nominación como “un insulto para los hombres y mujeres que cumplen con su deber apolítico hacia la Constitución”.
Estos son algunos de los puntos clave de la áspera audiencia de confirmación de Hegseth en el Congreso:
La verificación sobre el pasado de Hegseth es "insuficiente"
Reed le dijo a Wicker al comienzo de la audiencia que cree que la verificación de antecedentes del FBI sobre Hegseth fue “insuficiente”.
“Todavía hay obligaciones del FBI de hablar con la gente”, dijo el demócrata.
La verificación de antecedentes no investigó ni produjo nueva información más allá de lo que ya es de dominio público sobre Hegseth, según una persona familiarizada con la situación que habló de modo anónimo con la agencia AP.
El senador Richard Blumenthal, demócrata de Connecticut, le preguntó a Hegseth si estaría dispuesto a someterse a una verificación de antecedentes ampliada con entrevistas a excolegas, exesposas, “sobrevivientes de agresión sexual y otros”.
“No estoy a cargo de las verificaciones de antecedentes del FBI”, dijo Hegseth.
Hegseth negó las acusaciones, calificándolas como una “campaña de difamación coordinada” y reiteró que fue “completamente exonerado” de las denuncias previas.
A pesar de los señalamientos de consumo excesivo de alcohol y de un acuerdo extrajudicial por una denuncia de agresión sexual, Hegseth rechazó estas preocupaciones, describiéndolas como ataques motivados políticamente.
Hegseth no abordó directamente las acusaciones de mala conducta sexual y respondió agresivamente a los demócratas que hicieron preguntas al respecto, calificándolas de “campaña de desprestigio coordinada”.
Hegseth concluyó su testimonio diciendo: “No soy una persona perfecta, pero el compromiso es real”.
En 2017, una mujer le dijo a la policía que Hegseth la agredió sexualmente, según un informe de investigación detallado que se hizo público recientemente. Hegseth ha negado cualquier irregularidad y le dijo a la policía en ese momento que el encuentro en un evento de mujeres republicanas en California fue consensual. No fue acusado, pero le pagó a la mujer un acuerdo confidencial para evitar una posible demanda.
Cuando la senadora de Hawaii, Mazie Hirono, demócrata, le preguntó si había llegado a un acuerdo, Hegseth respondió que fue acusado falsamente. Ha dicho repetidamente que estaba “completamente absuelto”.
Hirono también le preguntó sobre los informes de consumo excesivo de alcohol, que él también ha negado. Hegseth ha dicho a senadores republicanos en reuniones durante el último mes que no beberá en el trabajo.
Los republicanos desestimaron las acusaciones.
Hegseth y una “cultura de guerreros”
Hegseth destacó que la principal instrucción de Trump fue “devolver la cultura de guerreros al Departamento de Defensa,” enfocándose en “la preparación para el combate, la letalidad, la meritocracia, los estándares y la disposición”.
Los republicanos han criticado al Pentágono de la istración Biden por fomentar iniciativas de diversidad, a las que califican como parte de una cultura “woke” (como se llama a quienes tienen posturas consideradas como liberales en extremo).
El senador Reed cuestionó esta postura, exigiendo a Hegseth que explicara cómo la diversidad debilita al ejército y advirtiendo sobre el riesgo de socavar el liderazgo, la preparación, el reclutamiento y la retención. Reed enfatizó: “Nuestro ejército es más diverso y más letal que nunca, y esto no es una coincidencia”.
Hegseth reconoció el liderazgo histórico del ejército en la integración racial, pero argumentó que las políticas modernas de diversidad e inclusión “dividen” a las tropas y no priorizan la meritocracia.
Peter Hegseth, un posible jefe del Pentágono “no convencional”
Los republicanos elogiaron la experiencia de combate de Hegseth y su falta de roles tradicionales de alto nivel. “Es momento de poner al mando a alguien con polvo en sus botas,” afirmó Hegseth.
Aunque no sería el primer secretario de Defensa con experiencia en combate, varios de sus predecesores, como Lloyd Austin, Chuck Hagel y Jim Mattis, también sirvieron en el campo de batalla y ocuparon posiciones de liderazgo destacadas.
Hegseth intentó abordar las críticas sobre sus comentarios pasados en los que afirmó que las mujeres no deberían servir en combate y sugirió que algunos soldados afroamericanos podrían no estar calificados. Prometió ser un líder para todos los del servicio, pero insinuó que los esfuerzos por la diversidad han reducido los estándares militares.
La senadora demócrata por Nueva York, Kirsten Gillibrand, criticó sus comentarios, calificándolos de perjudiciales para la moral, y afirmó: “Deberá cambiar su percepción sobre las mujeres para desempeñar este cargo”.
Hegseth insistió en que “los estándares deben ser los mismos y altos” y prometió revisar los casos en los que los estándares hayan sido supuestamente comprometidos para cumplir con cuotas de diversidad.