El queso es más saludable de lo que pensábamos y ya estamos en modo #PornFood
El queso es de esos alimentos que van bien con absolutamente todo, incluso cuando se trata de un postre dulce. Es enorme la variedad de tipos y sabores y, obviamente, los más deliciosos son los que a simple vista son menos saludables por su cantidad de grasas. Y la culpa siempre nos acompaña cada vez que caemos en la tentación y no podemos parar.
Pero la ciencia ha descubierto que los quesos que siempre creímos que son perjudiciales para la salud pueden, en realidad, beneficiar a nuestro organismo. Te contamos cómo.
Comer queso es beneficioso para el corazón
De acuerdo al estudio publicado por The American Journal of Clinical Nutrition, ciertos tipos de productos lácteos grasos, entre ellos el queso, podrían ayudar a reducir el colesterol, a pesar de que se necesita profundizar en las investigaciones científicas.
Durante 6 semanas seguidas, 164 personas con sobrepeso y mayores de 50 años comieron grandes cantidades de queso cheddar, uno de los tipos mas grasos y a simple vista menos saludables. Este análisis reveló que los adultos de mediana edad que comían este tipo de queso redujeron su colesterol en comparación con aquellos que ingieren quesos o mantequillas bajos en grasa.
La investigación llegó a la conclusión de que los consumidores regulares de queso, leche entera y otros productos lácteos grasos no corren un mayor riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular o muerte que una persona que evita estos productos.
El azúcar y los carbohidratos son un problema mucho más grave para la salud que el consumo de grasas. «Tenemos que dejar de pensar en los alimentos en términos de su grasa y su contenido de grasas saturadas, y pensar en ellos como un alimento completo», remarca Emma Feeney, encargada de la investigación y de estudios en nutrición y metabolismo humanos en la University College de Dublín.
Al parecer, el calcio y las proteínas lácteas que se encuentran en el queso son los causantes de reducir mejor los efectos de obstrucción arterial de la grasa en el cuerpo. Esto beneficia nuestra salud porque disminuye los riesgos de contraer algunas enfermedades.
Obviamente esto no significa que debamos comer excesivas cantidades de queso diarias, ya sabemos que todos los excesos son malos. Pero el simple hecho de no evitar completamente este tipo de alimentos es un aporte más que positivo para la salud. ¡Puedes comer queso sin culpa!
Atentos, amantes del queso: