6 mentiras que nuestros padres nos decían cuando éramos niños
Todo niño dice alguna que otra mentira. Ahora bien, ¿qué pasa cuando crecemos y descubirmos aquellas mentiritas blancas que nuestros padres nos decían a nosotros? ¿Alguna vez hiciste el ejercicio de pensar la cantidad de cosas que nos dijeron que no eran verdad?
Te invitamos a rememorar las oportunidades en la que los padres aprovecharon nuestra inocencia para reírnos un poco hoy en día. ¿Estás lista?
#1 - Ya casi llegamos
¿Cuántas veces escuchamos esta mentira ni bien acabábamos de salir? Ya casi llegamos, falta poco y otros derivados vivían decorando nuestros viajes y salidas para hacernos creer que no nos aburriríamos mucho más. Pero visto que esto en muy común en los niños, tampoco podemos culpar demasiado a nuestros padres, ¿o no?
#2 - Ya voy
Creemos que los padres conocían nuestro nivel de tolerancia que equivalía a seis "ya voy" con los que podían ganar tiempo hasta que finalmente íbamos a buscarlos. Pero, ¿hacía falta ilusionarnos tanto con que venían a nuestro rescate cuando lo necesitábamos? Típico de padres sin maldad.
#3 - No sé dónde está lo que estás buscando
Lamentablemente eso que estábamos buscando corría peligro de haber sido revisado, tirado o destruido sin que lo supiéramos. Tampoco podemos decir que nuestros padres lo hicieran a propósito, pero quizás sin darnos cuenta, aquel vestido, libro o CD que no sabíamos dónde estaban podían haber caído en las manos de alguno de ellos. ¡O de la basura!
#4 - Si no te apurás, nos vamos sin vos
Esta clase de amenazas infantiles son moneda corriente entre padres e hijos. Aunque no creyéramos que verdaderemente nos iban a dejar varados a nuestra suerte, era el último aviso para dejáramos lo que sea que estábamos haciendo y corriéramos hacia lo que nuestros papás nos tenían preparado. ¿Te acordás?
#5 - Ese lugar está cerrado hoy a esta hora
Esta frase justamente coincidía con todos nuestros lugares preferidos. Desde heladerías hasta jugueterías casualmente a la hora que proponíamos ir a visitarlas no estaban disponibles para nosotros. ¿Casualidad o mucha imaginación por parte de nuestros padres al recordar que ellos eran los adultos? ¿Vos te acordás algún lugar que "siempre estaba cerrado"?
#6 - Ya vamos a ver
Una vez que escuchábamos esto ya sabíamos que la partida estaba perdida. Aunque nos quedáramos pensando eternamente en ese "vamos a ver" era muy probable que la respuesta fuera no.
¿Te sentíste identificada con alguna de estas situaciones? ¿Viviste algunas otras que te gustaría compartir? ¿Qué estás esperando?