5 ideas perfectas para preparar y acompañar el salmón
El salmón es uno de esos alimentos que dicen “fiesta” más alto que cualquier otro, al igual que el pavo, las codornices y el caviar. Y justamente como suele ser una comida que reservamos para ocasiones especiales, a veces nos pueden entrar dudas acerca de con qué deberíamos servirlo.
Para despejar tus dudas, aquí encontrarás 5 formas de cocinar el salmón y con qué acompañarlo en cada caso.
1. Salmón en salsa teriyaki
Para acompañar el salmón en salsa teriyaki, nada mejor que una ensalada asiática. El aderezo de zanahoria y jengibre, omnipresente en los restaurantes japoneses es delicioso, pero hay muchas más formas de combinar los sabores asiáticos clásicos de forma nutritiva.
Para preparar una ensalada asiática combina una rama de apio y hojas de perejil con rábano, y brotes de soja o alfalfa y cebolletas, y báñala con una vinagreta de limón y sake (vino de arroz).
2. Salmón escalfado
El salmón escalfado queda muy bien con una ensalada de papas a la mostaza de Dijon. Hierve las papas y sírvelas con hojas de berro y un aderezo de mostaza de Dijon. Si tienes eneldo, pícalo finamente y añade a la ensalada como guarnición.
Ver también: Salmón con salsa de eneldo
3. Salmón al horno
Sírvelo con espárragos a la parrilla. Las verduras ligeramente carbonizadas tienen un sabor que armoniza muy bien con el salmón al horno. Sólo tienes que cepillar los tallos de espárragos con aceite de oliva, sazonar con sal y pimienta, y ponerlos sobre la parrilla hasta que estén tiernos al pincharlos con un cuchillo.
4. Hamburguesas de salmón
Sirve tus hamburguesas de salmón con verduras crujientes. Hornea una variedad de verduras, desde patatas hasta boniatos (camotes), judías verdes, pimientos, etc. Antes de llevarlas al horno recúbrelas con harina de maíz mezclada con queso parmesano rallado, para asegurarte que van a quedar sabrosas y crujientes.
5. Carpaccio de salmón
El carpaccio de salmón va muy bien con patatas rústicas asadas. Prepara las papas de esta manera: lava y corta las patatas en cuartos (con piel), y colócalas en una sartén de hierro fundido caliente con cebolla, aceite de oliva, romero, sal y pimienta. Llévalas al horno y sírvelas cuando estén los bordes crujientes y el interior suave.
¿Se te ocurren otras ideas de acompañamientos que combinen bien con el salmón?