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Demandas

Querían un hijo, usaron fertilización in vitro, pero terminaron abortando y demandando a sus doctores

Una pareja logró un embarazo asistido, pero una prueba de ADN mostró que no eran los padres biológicos del bebé. En la clínica les aseguraban que sí, a pesar de que varias pruebas arrojaron el mismo resultado. Todo está siendo debatido en tribunales.
Publicado 6 Abr 2022 – 12:30 PM EDT | Actualizado 7 Abr 2022 – 09:41 AM EDT
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Una pareja está demandando al Instituto de Fertilidad de Nueva York, al embriólogo Michael Femi Obasaju y a los especialistas en fertilidad Khalid Sultan y Majid Fateh, por presuntamente haber fecundado con un óvulo equivocado el embrión de una mujer que fue inseminada 'in vitro', de acuerdo con una demanda presentada ante el Tribunal del Distrito sur de Nueva York.

Según los registros judiciales, la pareja, natural de Massachusetts e identificada solamente como Jane y John Doe, había hecho varios intentos fallidos de fertilización in vitro para tener un hijo, hasta que el año pasado recibieron la gran noticia de que la mujer finalmente estaba embarazada.

Pero los temores comenzaron cuando, ya con varios meses de embarazo, el obstetra recomendó que la madre se sometiera a pruebas genéticas para descartar cualquier anomalía. Lo primero que vieron es que la bebé, una niña, estaba bien, lo cual los dejó muy tranquilos, pero entonces supieron algo que no podían imaginar: había 0% de probabilidades de que ellos fueran sus padres biológicos.

Desde el Instituto de Fertilidad de Nueva York, en donde les hicieron el procedimiento de fertilización, les aseguraban que ese resultado no era un problema y que ellos eran los padres biológicos.

Primero le dijeron que la prueba era inexacta, y luego que era posible que la madre tuviera una rara condición médica en la que su cuerpo podría contener dos conjuntos de ADN.

Pero la pareja siguió insistiendo con pruebas y al final, temiendo el costo emocional que tendría toda la batalla legal que les esperaba por delante, decidieron poner fin al embarazo, poco antes de que venciera el plazo legal para hacerlo, de acuerdo con la demanda.

¿Cómo implantaron el embrión equivocado?

La pareja se conoció en 2010 y soñaba con tener cuatro hijos. Ya tienen tres y buscaban su cuarto y último descendiente, para lo cual tuvieron que consultar a varios especialistas. Tuvieron la primera consulta con el doctor Majid Fateh el 28 de abril de 2020, según consta en los documentos judiciales.

En octubre de 2020 y abril de 2021 la mujer se sometió a tres extracciones de óvulos en la clínica del Instituto de Fertilidad de Nueva York.

El 7 de julio de 2021, el doctor Khalid Sultan implantó el que se suponía que era el embrión fecundado de la pareja en el útero de la mujer. Al mes siguiente, supieron que ella había quedado embarazada. No fue hasta que su obstetra recomendó las pruebas genéticas que apareció el problema.

Entonces, según aparece en la demanda, el doctor Sultan le aseguró que se trataba de un error de laboratorio y que no debía preocuparse. Pero luego la mujer hizo otra prueba genética que arrojó los mismos resultados y la clínicia siguió asegurando que no era posible que hubiera un error, porque el suyo había sido "el único implante hecho en toda la semana".

En octubre la pareja visitó a un asesor genético, y realizaron pruebas de ADN adicionales que volvieron a arrojar el mismo resultado. Pero Sultan y Fateh siguieron diciéndole a la mujer que era su hijo biológico y que todo podía a deberse a una rara condición, llamada mosaicismo, en la que una persona puede compartir dos conjuntos de ADN en su cuerpo.

Pero la pareja siguió investigando por su cuenta y fueron a ver a un embriólogo independiente, quien intentó reunirse con el embriólogo de la clínica, el doctor Obasaju, para que le facilitara las pruebas de la transferencia del embrión y en general de todo el proceso de fertilización, algo que la clínica no permitió.

Finalmente, convencidos de que no se trataba de su hijo biológico y de que les esperaba una pelea legal por delante, la pareja decidió interrumir el embarazo.


“La mala conducta de los acusados le robó a la señora Doe la capacidad de tener a su propio hijo”, afirma la demanda, citada por el diario The Washington Post. "... Están atormentados por preguntas sobre qué fue de sus embriones. ¿Han tenido que preocuparse por si sus embriones fueron transferidos a otra pareja involuntariamente, y si tienen otro hijo o hijos en el mundo que nunca han conocido?".

Actualmente, el Departamento de Salud del estado investiga a la institución médica.

Un caso similar de embriones equivocados en California

Una pareja de Los Ángeles vivió recientemente una historia similar pero aún más intensa y compleja, ya que dieron a luz a un bebé que no era suyo, algo que descubrieron poco después de haberlo tenido como propio, cuando ya se habían encariñado con el niño.

Daphne y Alexander Cardinal, residentes de Los Ángeles, llevaban ya cuatro meses junto a su hijo, a quien amaban profundamente. Habían notado que el pequeño tenía la piel y el pelo un poco más oscuros que ellos, y que su hermana, la hija mayor de la pareja. Fue entonces cuando una prueba de ADN demostró lo que ellos no podían imaginar: no eran los padres biológicos del niño.

Al contarlo a la clínica, se vieron obligados a entregar al bebé. Al mismo tiempo, se localizó a su hija biológica, ya que el óvulo fecundado de la pareja se lo habían puesto a otra mujer, que había criado también durante cuatro meses a una bebé que no era suya.

Los Cardinal también demandaron a la clínica, ubicada en California.

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