Los hitos de 4 semanas de revolución que presagian un Puerto Rico sin "vuelta atrás"

SAN JUAN, Puerto Rico.- Cuando el mes de julio arrancó en Puerto Rico, nadie imaginó que debería recurrir tantas veces a la frase 'por primera vez'. Pasaban los días, las semanas y, sorprendentemente, cada nuevo hito que se alcanzaba en el desarrollo de una inédita crisis política en la isla obligaba a usarla sin que hubiese duda alguna de que lo ameritaba con todas sus letras.
Lo sucedido entre las últimas tres semanas de julio y la primera de agosto fue tan intenso y vertiginoso que cada 'por primera vez' debiera escribirse en mayúsculas.
- Por primera vez un gobernador electo por los puertorriqueños renunció al cargo acorralado por las manifestaciones más grandes que se hayan visto en la isla.
- Por primera vez el Tribunal Supremo declaró inconstitucional la juramentación de un gobernador.
- Por primera vez Puerto Rico tuvo tres gobernantes en menos de un mes
- Por primera vez se filtró un chat que desnudó a un mandatario y su equipo más cercano, desatando la peor crisis política de la historia reciente.
Fue un terremoto político que llevó al estado libre asociado de EEUU a un punto de no retorno con potenciales cambios políticos y sociales en camino. Y con trabas en Washington que posiblemente empañen aún más el panorama económico de una isla en quiebra.
Explicamos qué significan hacia adelante algunos de los hitos de 'la revolución pacífica del verano del '19':
Protestas lideradas por una generación joven que le espetó 'yo no me dejo' a un gobernador electo que por primera vez renunció al cargo:
Y apoyadas por puertorriqueños que gritaron un hartazgo generado por años de corrupción gubernamental en los dos partidos que históricamente se han alternado el poder, una debacle producida por 13 años de recesión económica y una deuda que se empina sobre los 70,000 millones de dólares y, más recientemente, un manejo inadecuado del gobierno de Ricardo Rosselló ante miles de muertes ocasionadas por el devastador huracán María en el 2017.
Este verano "tomó a todo el mundo por sorpresa, incluyendo a observadores muy agudos (...) La gente reaccionó, la rapidez con la que se movilizó es impresionante, la intensidad y la velocidad contiene precedente en Puerto Rico", dijo a Univision Noticias Juan Giusti Cordero, historiador y profesor de la Universidad de Puerto Rico.
"El pueblo tuvo que salir a la calle porque no veía otra alternativa a través de los partidos políticos o la fiscalización de la oposición. No se daba una situación así en Puerto Rico desde los años de 1930, que fue una época también de huracanes y crisis económica", explicó.
La década de 1930 que recuerda Cordero estuvo marcada por una movilización masiva de los puertorriqueños que tuvo como punto más álgido una huelga de los trabajadores de la industria de la caña de azúcar. Ello dio paso a nuevos partidos, como el Popular Democrático, y allanó el camino para la creación de nuevas estructuras gubernamentales y políticas, vigentes actualmente.
Un escenario similar ha cuajado en las últimas semanas y podría comenzar a cocinar cambios políticos en las elecciones del 2020. "No se sabe si este realineamiento de fuerzas va a tener efecto tan pronto como en las próximas elecciones, que es muy posible, o si va a ser después", dijo Giusti Cordero.
Jóvenes como Aliana Bigio, una estudiante y activista de 21 años, consideran que su gesta es permanente y presagia cambios próximamente. Bautizados como la 'generación del yo no me dejo' en una canción del boricua Bad Bunny, son los jóvenes herederos de la crisis económica que han crecido escuchando acusaciones de corrupción y viendo desfilar a funcionarios de alto nivel esposados y custodiados por agentes del FBI.
Fueron ellos quienes mantuvieron vivas las protestas en contra del gobierno de Rosselló durante 15 días, apostados principalmente frente a la mansión ejecutiva en la Calle de la Fortaleza, que pasó a llamarse de sopetón la Calle de la Resistencia.
Protestaron día y noche –apoyados por artistas como Ricky Martin– hasta que al filo de la medianoche del 31 de julio, el gobernador caído en desgracia anunció que se iría el 2 de agosto.
"Somos una generación que no tiene nada que perder, que quiere quedarse aquí (en la isla)" mientras muchos se ven obligados a emigrar a Estados Unidos", dijo Bigio a Univision Noticias. "Le vamos a todas, llueve o truene", como sucedió en una de las manifestaciones.
Son jóvenes que consideran que pueden ayudar a producir un cambio político pues se sienten ajenos a los partidos tradicionales, a diferencia de muchos adultos que se han casado con alguno de los tres principales partidos: el Partido Independentista, el Partido Popular Democrático y el actual partido de gobierno, el Partido Nuevo Progresista.
"Nosotros no tenemos ese fanatismo como el de nuestros papás, que los enseñaron a votar íntegro (por un partido). No le debemos lealtad a ningún partido y por eso en las manifestaciones no se vio ningún tipo de bandera con un partido porque era una manifestación del pueblo", enfatizó Bigio, fundadora del proyecto digital CON(Sentimiento).
El impacto de la peor crisis política de la historia reciente en el dinero federal que necesita la isla después del huracán
Desde mucho antes de que se desatara esta crisis política, el presidente Donald Trump estaba enfrentado con los políticos de la isla. Por un lado, Trump los tildaba de "incompetentes" y "corruptos" y, por el otro, Rosselló ofrecía pegarle un puño en la boca. Por primera vez un gobernador puertorriqueño estaba en "abierto conflicto con el presidente de Estados Unidos", explicó el historiador Giusti Cordero.
"Este conflicto con el presidente Trump tiene un alcance enorme. La situación de dependencia de los fondos federales es más aguda que nunca porque se trata de fondos de recuperación de desastre (por el huracán) y la cantidad de dinero que está en juego ponía a prueba los mecanismos de istración y fiscalización de Puerto Rico como nunca antes", agregó.
Pero el 10 de julio pasado, una retahíla de arrestos dio municiones a Trump para que se reafirme en sus arremetidas contra los políticos de la isla. Bien temprano ese día fueron arrestados la exsecretaria de Educación de Rosselló, Julia Keleher, la exdirectora de la istración de Seguros de Salud, Ángela Ávila, y el excontratista Alberto Velázquez Piñol, entre otros.
La fiscalía federal los acusó de presunto fraude y de haber desviado 15.5 millones de dólares en fondos federales. Los arrestos y la profunda crisis política que vino después han hecho que el gobierno federal tenga aún más bajo la lupa el envío de unos 40,000 millones de dólares para la reconstrucción después del azote de María.
De ser desembolsados, estos fondos impulsarían la economía local en entre un 2% y un 3% anual en los próximos dos años y medio, dijo a Univision Noticias el economista Gustavo Vélez. Las repercusiones ya resuenan en la Casa Blanca. De acuerdo con The Washington Post, la istración de Trump acordó a inicios de agosto imponer nuevas restricciones al envío de 8,300 millones de dólares a la isla.
Un gobernador que insultaba y se mofaba… hasta que fue desnudado por un chat: el detonante, la válvula de escape, el punto de ebullición.
La mañana del 13 de julio y las 889 páginas del chat de Telegram –publicadas por el Centro de Periodismo Investigativo– pasaron a la historia como el momento en que Puerto Rico dijo 'suficiente'. Si bien Rosselló ofreció disculpas por haber "liberado tensiones" en ese chat, la realidad es que las conversaciones lo pintaron de cuerpo entero a él y a su equipo cercano: diez jefes de gabinete, asesores de comunicaciones y un exfuncionario que pasó a hacer lobby a favor de empresas privadas, todos hombres.
En las conversaciones, Rosselló llamó "putas" a la exconcejal de Nueva York Melissa Mark-Viverito y a la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz; y se burló de un colaborador del partido obeso. Su principal asesor financiero, Christian Sobrino, dijo que estaba "salivando para caerle a tiros" a Cruz; y preguntó si alguien tenía algún cadáver para lanzarle a los cuervos, en referencia a los cuerpos que se acumularon en Ciencias Forenses tras el golpe del huracán. Y, en una de las frases que más se han repetido tras la divulgación del chat, Rosselló felicitó a su equipo porque "cogemos de pendejo hasta (a) los nuestros".
"Imagínate si (Robert) Mueller hubiese tenido eso, si hubiera tenido 900 páginas de chat, precisamente la evidencia que no ha podido conseguir análoga a las famosas grabaciones de (el expresidente Richard) Nixon que son prueba incontestable", dijo Giusti Cordero en referencia a la investigación realizada por el exfiscal especial Mueller sobre la posible intervención rusa en las pasadas elecciones estadounidenses.
Actualmente, las autoridades locales investigan para dilucidar si hubo comisión de delito en el chat, donde Rosselló y sus funcionarios compartieron información sensible con personas que no eran parte de su istración, especialmente con el cabildero Elías Sánchez Sifonte, quien fue el director de campaña de Rosselló y de acuerdo con una investigación del Centro de Periodismo Investigativo, fue la cabeza de un complejo entramado de corrupción. Sánchez Sifonte lo ha negado.
Tres mandatarios en menos de una semana y un Tribunal Supremo que por primera vez decidió el futuro de una gobernación
Tras la renuncia de Rosselló, la crisis política sorpresivamente se trasladó al máximo tribunal de la isla. Días antes de que se hiciese efectiva su renuncia, él designó como secretario de Estado –y primero en la línea de sucesión constitucional– a Pedro Pierluisi, un abogado que fue por ocho años el delegado boricua en Washington.
Pierluisi interpretó de forma errónea una ley de 2005 y juramentó en el cargo sin haber sido confirmado como secretario de Estado en las dos Cámaras de la Legislatura. Obtuvo el visto bueno de la Cámara de Representantes, pero no el del Senado. Un furibundo presidente senatorial, Thomas Rivera Schatz, lo demandó ante el Supremo para removerlo de la gobernación.
Finalmente, en una decisión unánime y en el que es para muchos el caso constitucional más importante que ha visto esta corte, los jueces sentenciaron que la asunción de Pierluisi fue inconstitucional y le dieron cuatro horas para que cediera el sillón ejecutivo a la secretaria de Justicia y segunda en el orden sucesoral, Wanda Vázquez.
"El verano del 19 se recordará como aquel en el que el Poder Judicial, por disposición unánime de los de su máximo foro, asumió con entereza y gallardía su rol como el intérprete final y defensor máximo de la Constitución del Estado Libre Asociado de Puerto Rico", escribió la presidenta del Tribunal Supremo, Maite Oronoz.
"En nuestro ordenamiento, nadie –ni siquiera el Estado– está por encima de la ley", afirmó en una sentencia que también fue saludada por unanimidad en la isla.
Una gobernadora que, si bien es del partido del gobierno, por primera vez es ajena a su estructura:
El fallo del Supremo dio paso a un escenario que había sido rechazado durante las protestas: Wanda Vázquez en la gobernación. Esto porque la ahora exsecretaria de Justicia es vista como una figura demasiado cercana a la istración de Rosselló e incluso como una continuación de la misma.
Sabiéndolo, horas después de asumir Vázquez envió un mensaje en el que se describió como una funcionaria que hizo una carrera desde abajo y abierta a conversar con todos por igual. En sus primeros días en el cargo también ha desafiado sorpresivamente la presión de pesos pesados del partido oficialista que públicamente dijeron preferir en la gobernación a la actual comisionada residente en Washington, Jenniffer González.
"Ella es la primera gobernadora de este partido que no es de las estructuras del partido, no es de la élite económica y social", explicó el historiador Giusti Cordero. "El Partido Nuevo Progresista no aguanta mucha disidencia y puede ser que, aunque ella no esté muy decidida de cómo es que gobernará, por la oposición tan feroz que posiblemente desaten contra ella (...) la obliguen a (endurecerse en contra del partido). Va a tener al partido mirando sobre sus hombros todo el tiempo", anticipó.
Esa oposición provendría principalmente de los líderes legislativos, lo que amenaza con trabar iniciativas de la Rama Ejecutiva y empantanar nombramientos clave, como el de la secretaría de Estado, que sigue vacante.
En las calles por el momento ha habido calma. Pero los jóvenes han prometido estar vigilantes.
"El puertorriqueño siempre ha puesto los estándares para sí mismo bien bajos, ya sea para los políticos o para lo que nos merecemos o no, todo lo bueno que nos pasa es como si fuese una sorpresa (...) Ahora que tuvimos esta batalla que ganamos (conocemos) el poder que tiene ir a la calle y protestar. Cuando un pueblo se hace consciente de eso, ya no hay vuelta atrás", había dicho la joven Bigio.