Una navaja, una pistola, prendas negras: lo que halló el FBI en la casa del sospechoso de matar a cuatro universitarios en Idaho
Detectives del Buró de Investigaciones Federales (FBI) ofrecieron más detalles sobre los objetos incautados en el domicilio de Pennsylvania donde detuvieron a Bryan Kohberger, sospechoso de matar a puñaladas a cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho a finales del año pasado.
Documentos judiciales adicionales hechos públicos este jueves indican que en el domicilio de los padres de Kohberger se encontraron un cuchillo, una navaja y una pistola Glock .22 con tres cargadores vacíos. La casa, el auto de Kohberger, el garaje y un cobertizo de la propiedad fueron registrados cuando fue detenido allí el 30 de diciembre.
La policía se llevó un de la puerta del automóvil, cojines de asiento, reposacabezas, cinturón de seguridad, visera, pedales de freno y acelerador, una tirita, "mapas y documentos", y otros objetos, entre ellos ropa y una pala.
En el domicilio de Kohberger se incautaron un teléfono móvil, un ordenador portátil y dos recipientes con una "sustancia de hoja verde", además de mascarillas negras, un sombrero negro y varias prendas de vestir de color oscuro y un libro con "subrayado en la página 118".
Los documentos recientemente desclasificados se hicieron públicos dos días después de que las autoridades anunciaran por primera vez detalles sobre lo incautado en el domicilio cuando la policía del estado de Pennsylvania detuvo a Kohberger, un antiguo estudiante de doctorado de 28 años de la Universidad Estatal de Washington, en Pullman.
Se le imputan cuatro cargos de asesinato en primer grado y allanamiento de morada en relación con las muertes por apuñalamiento en Moscow, Idaho.
Los cadáveres de Madison Mogen, Kaylee Goncalves, Xana Kernodle y Ethan Chapin fueron hallados el 13 de noviembre de 2022 en una casa de alquiler situada frente al campus de la Universidad de Idaho. Sus muertes conmocionaron a la comunidad rural de Idaho y a la vecina Pullman.
Kohberger no usó la pistola, pero el arma puede ayudar a la investigación criminal
Aunque el sospechoso no utilizó un arma de fuego, la pistola incautada en su residencia puede ser de utilidad en la investigación, dijo Michael Alcázar, profesor del John Jay College of Criminal Justice citado por la cadena NBC News.
" Puede que tuviera el arma encima cuando cometió estos crímenes. Podría tener sangre, saliva, sudor de las víctimas y transferirlo al arma", explicó Alcázar, detective jubilado de Nueva York.
La pistola Glock 22, una de las más populares en los cuerpos policiales de EEUU, podría tener ADN de las víctimas que darían más pistas a los investigadores.
"Podría haber algunos tiroteos u homicidios sin resolver que podamos relacionar con esta arma", comentó Alcázar. "Yo probaría absolutamente esa arma para eso".
En el momento de los crímenes, Kohberger hacía un doctorado de justicia penal y criminología en la Universidad Estatal de Washington en Pullman, a poca distancia de Moscow. Un funcionario de la universidad ha dicho que Kohberger ya no está matriculado.
Kohberger ya tuvo una audiencia en una corte de Idaho tras haber sido trasladado desde Pennsylvania, donde fue arrestado a fines de diciembre.
La siguiente vista preliminar está prevista para finales de junio.
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