En un vuelo de Scandinavian Airlines, que viajaba de Estocolmo, Suecia, a Miami se experimentó una fuerte turbulencia que causó caos, gritos y un gran susto entre los pasajeros. El avión tuvo que aterrizar en Dinamarca por seguridad. Te puede interesar: La FAA suspende todos los vuelos hacia Haití durante un mes tras ataque a un avión de Spirit Airlines.