Operadora del 911 atiende llamada de su propia hija adolescente durante un robo
Una veterana operadora del 911 atendió una llamada de emergencia que su propia hija hizo justo en el momento en que ocurrió un robo armado en un restaurante de comida rápida de la ciudad de Nueva Orleans.
El pasado 17 de octubre alrededor de las 20:00 horas, Teri Clark identificó enseguida el número celular de su hija, Tenia Hill, cuando lo vio aparecer en la pantalla de su central de emergencias. Antes de responder, verificó si no tenía llamadas perdidas de ella en su teléfono móvil.
Al no encontrar ninguna comunicación de la chica de 16 años, atendió el teléfono como normalmente lo hace.
“Nueva Orleans 911, ¿cuál es la ubicación de la emergencia?”, dijo.
Del otro lado, escuchó a Hill decirle que se encontraba en la cámara frigorífica del restaurante McDonald’s donde la estudiante del tercer año de secundaria recién había comenzado un trabajo de medio tiempo como cajera.
Encerrados a la fuerza
Momentos antes, un ladrón había ingresado al restaurante y había amagado a los comensales y a media docena empleados, a quienes obligó a ingresar a la cámara frigorífica.
“Mamá, ¿puedes enviar un oficial de policía ahora mismo al McDonald’s?” preguntó Hill, según se escucha en una grabación de video obtenida por el diario The Washington Post.
"¿Dónde?", preguntó Clark.
“¡En mi trabajo, mamá!”, respondió la chica.
“Cuando mi hija me dijo que estaba encerrado en el congelador, supongo que mi parte de mamá entró en pánico, pero el operador dentro de mí en mí sabía: ‘Demonios, tengo que ayudar a mi hija'”, dijo Clark al diario.
“Me corrían lágrimas por la cara, pero aún tenía que hacer el trabajo”, agregó.
La llamada duró tres minutos y 45 segundos.
A sabiendas de que se trataba de su hija, Clark aseguró al diario que procesó la llamada como lo hace con cualquier otra emergencia.
Clark envió a la policía y colgó. En ese momento fue a ver a su jefe de turno y le explicó la situación, que su hija acababa de denunciar el robo y que tenía que irse.
Clark corrió al lugar, donde la policía ya estaba investigando. Los oficiales reconocieron a Clark, le dijeron que su hija estaba bien. Media hora más tarde, la chica salió del local sin sufrir ninguna herida, pero con mucho miedo de volver al otro día al trabajo.
Hasta el momento, la policía de Nueva Orleans no ha notificado de ningún arresto por el robo al restaurante. La mujer y su hija tampoco saben si ha habido avances en la investigación.
Clark ha dicho que ha considerado retirarse; sin embargo sus compañeros de trabajo la animaron insistiendo en que hizo una gran labor al apoyar a lo más preciado en la vida para ella.
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