Una afrolatina busca visibilidad para su comunidad a través de la música

Xiomara Marie Henry no pensó mucho sobre el popurrí de culturas en las que creció. Vivir en Brooklyn significaba estar automáticamente inmersa en una variedad de culturas de todo el mundo. En su casa puertorriqueña-panameña se podía escuchar salsa, boleros y Motown a todo volumen. En su habitación, sin embargo, escuchaba bandas de pop, punk rock y hip hop. Creciendo en una ciudad que ofreció una experiencia musical tan rica en los años 90 la inspiró a hacer una carrera en la industria.
No fue hasta que comenzó a pinchar durante la universidad que Xiomara, ahora conocida como DJ Bembona, comenzó a aprender sobre la dualidad de su identidad. Ella es afroamericana y latina, pero enfatiza que una no está separada de la otra. Fue a través de la música que creó un espacio para aprender sobre sus raíces. “Cuando toco reguetón, aseguro mostrar a diferentes artistas y de explicar que las raíces de esta música son de Jamaica, Panamá y Puerto Rico. Es una lección de historia porque la gente tiene que aprenderlo".
Cuanto más aprendía sobre la música de sus antepasados, más quería llevar a su comunidad de Nueva York a vivir la experiencia con ella. Para lograrlo, Bembona lanzó Vibras NYC en un club nocturno de la ciudad para tocar música de la era Fania. Rápidamente se convirtió en una celebración de los géneros musicales de la diáspora africana. Mientras que el trap latino y los afrobeats llenaban los altavoces de los clubes donde pincha, Bembona soñaba con unir a personas de diferentes orígenes en un mismo lugar.
Hoy día, su misión es poder compartir una experiencia musical que estimula la sanación, con énfasis en educar a sus oyentes sobre la latinidad negra. “Todavía hay mucha desconexión entre nuestros hermanos africanos, nuestros hermanos caribeños. Hay mucho que aprender”, dice. "Ese es mi trabajo en este momento: unir a todas las comunidades negras de la diáspora, porque no estamos solos". Bembona explica que la gente está tan convencida de lo que creen que es un latino que realmente no saben que venimos en una variedad tan grande, incluidos aquellos con raíces africanas.
Bembona recuerda que Nueva York siempre estuvo a la vanguardia de tantos movimientos sociales y quiere que en este momento se levanten y se escuchen las voces de los afrolatinos. Por eso, cuando no está pinchando, está en la comunidad participando en festivales y eventos culturales que muestran la diversidad de Nueva York. Ella anima a las personas a que asistan y conozcan a sus vecinos para crear un ambiente más armonioso.
Mientras Bembona continúa explorando la realidad multifacética de su identidad, espera abrir la puerta a más artistas de diversos orígenes. Además de abrir su propio local para tocar música, Bembona planea realizar una gira por América Latina, continuando con su misión de empoderar a los afrolatinos a través de la cultura.
“Soy más que una DJ. Quiero seguir impulsando a mi gente hacia adelante. Quiero asegurarme de que las personas que se parecen a mí sean vistas y recibidas".