Los científicos están entrenando vacas para que vayan al baño: su plan es salvar el planeta
Las vacas están aprendiendo a ir al baño, tal y como lo hacemos los humanos o los perros mejor entrenados. Detrás de este nuevo hábito existe una investigación científica con un noble propósito.
Vale la pena recordar que la industria de la carne roja ha prendido las alarmas en los últimos años, por su impacto en el medio ambiente. Esto porque al hacer la digestión, las vacas producen metano, un gas que emiten a través de sus eructos y desechos fecales.
Dicho gas calienta entre 28 y 34 veces más que el dióxido de carbono en un lapso de 100 años y, si tomamos en cuenta lo mucho que ha aumentado la demanda de carne vacuna en los últimos años, se considera de las más contaminantes.
De hecho, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) asegura que la ganadería produce hasta el 10 por ciento de los gases de efecto invernadero generados por actividades humanas.
Frente a este escenario, los científicos se han planteado diferentes opciones para reducir el impacto de la industria. La más reciente de ella es entrenar a las vacas para que vayan al baño en un solo lugar.
La buena noticia es que los primeros experimentos parecen ser exitosos y, por lo tanto, sería una alternativa viable.
Científicos de la Universidad de Auckland y el Instituto Leibniz de Biología de Animales de Granja diseñaron un programa llamado MooLoo, con el objetivo de enseñarles a 16 vacas a hacer pipí en un sitio específico.
Este consistía en darles premios como agua dulce y cebada cuando iban al sitio indicado y rociarlas con agua fría en caso de que fallaran, condiciones muy parecidas a las de los perros entrenados.
A las pocas semanas, 11 de ellas ya sabían ‘ir al baño’ y solo 5 no lo aprendieron, aunque los científicos creen que es cuestión de tiempo para que lo comprendan por completo.
Si bien la orina de las vacas no contamina tanto como sus heces, los autores del estudio (publicado en Current Biology) aseguran que contiene amoníaco y, cuando éste se filtra al subsuelo, se puede convertir en óxido nitroso, que también es un gas contaminante.
Además, que las vacas hagan del baño en un solo lugar permitirá que sus desechos sean tratados con más facilidad y de otras maneras para que no contamine tanto.
Jan Langbein, psicóloga de animales del Instituto Leibniz de Biología de Animales, aseguró que:
¿Crees que esta nueva habilidad de las vacas se pueda replicar en todo el mundo y así reducir sus gases? Cuéntanos en los comentarios qué te parece el experimento.
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