Magneto vs Iron Man: ¿quién ganaría una pelea? Los cómics mostraron la batalla de intelectos
Iron Man y Magneto han sido líderes respetados de sus respectivos equipos, los Avengers y los X-Men, por lo que una batalla entre ellos era una de las más pedidas por los fans y, a diferencia de otras peleas entre personajes, Marvel no la dejó como una situación hipotética.
El ganador de una pelea entre el mutante y el multimillonario parecería ser sencillo de elegir, pues Magneto controla el metal y Iron Man utiliza una armadura de metal para protegerse. Por lo tanto, Erik podría destruir su armadura y Tony sería fácilmente derrotado.
Esto ocasionó que Iron Man fuera subestimado al momento de enfrentar a Magneto. Sin embargo, no hay que olvidar que Tony Stark es un genio y estratega que puede desarrollar cualquier tipo de tecnología para vencer, controlar y anticipar a sus adversarios.
El mutante y el Avenger se enfrentaron el cómic Avengers vs X-Men, de 2012, y Iron Man sorprendió al mundo destacando en una batalla que parecía perdida.
El conflicto
A pesar de tener el mismo interés por defender la Tierra, los héroes de ambos equipos tuvieron un conflicto porque la Fuerza Phoenix se dirigía al planeta en la historia de Avengers vs X-Men.
Los mutantes creían que la fuerza cósmica era una salvación de la Tierra, mientras que los Avengers pensaban que sería el fin del mundo.
Los X-Men parecían superar en habilidades al equipo de Iron Man; sin embargo, Tony anticipó varios ataques y preparó a sus héroes para no recibir tanto daño. Por ejemplo, neutralizó los poderes psíquicos de Emma Frost.
Sin embargo, la batalla estelar era con el defensor número uno de los mutantes e incluso los aliados de Iron Man anticiparon una batalla perdida, pero Tony Stark se adelantó a los poderes de su oponente.
La estrategia
Iron Man construyó una armadura especial con nanotubos de carbono en lugar de metal para que Magneto no pudiera controlarlo. De esta manera, el mutante no pudo atacarlo como esperaba.
Sin embargo, la batalla entre los héroes se llevó a cabo en la isla de los mutantes que, para ventaja de Magneto, estaba hecha de metal, así que Magneto pudo atacar con facilidad a Iron Man.
El segundo plan de Iron Man consistía en desatar un enjambre de imanes de neodimio de alto grado para neutralizar el campo magnético de su oponente, pero el mutante lo desmanteló con facilidad.
Iron Man recurrió a su último recurso: una cadena de satélites orbitando Júpiter que le permitirían aprovechar el campo magnético del planeta gaseoso para potenciar su armadura.
El Avenger pudo golpear a Magneto, pero él se dio cuenta de la tecnología de Tony Stark así que desmanteló rápidamente los satélites con sus poderes.
El mutante respondió absorbiendo el campo magnético de todos los planetas que tenía a su alcance y golpeó a Iron Man con una fuerza que el Avenger no había experimentado antes.
El final de la pelea
Una vez más, la batalla parecía perdida para Iron Man; sin embargo, mientras Magneto utilizaba el magnetismo cósmico sintió una interrupción en los campos magnéticos porque un planeta fue destruido.
El mutante no tenía la capacidad de destruir un planeta con sus poderes, así que intuyó que se trataba de la Fuerza Phoenix acercándose a la Tierra y colapsando con todo lo que se atravesara en su camino.
Magneto perdió la concentración mientras asimilaba el peligro que estaba por llegar y, además, debía aceptar que los Avengers tenían razón. De esta manera, Iron Man aprovechó para golpear al mutante y la pelea se dio por terminada para detener a la Fuerza Phoenix.
La victoria de la batalla se le atribuye a Iron Man porque él dio el último golpe y su idea de salvar al mundo era correcta; sin embargo, a pesar de las estrategias, Magneto le dio una paliza y, si no se hubiera rendido, la pelea habría sido del mutante.
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