Kim Kardashian causó polémica en el Vaticano con un vestido: su significado es poderoso
Kim Kardashian visitó el Vaticano y utilizó un vestido de un reconocido diseñador mexicano que hizo enojar a algunas personas: te explicamos por qué.
Kim Kardashian es una celebridad que suele acaparar reflectores y verse envuelta en polémicas, ya sea por su vida privada o profesional, pero no da un paso sin pasar desapercibida.
El martes 29 de junio, Kardashian volvió a ser el centro de atención público porque fue captada en una visita al Vaticano para entrar a la Capilla Sixtina y a la Basílica de San Pedro.
La estrella de televisión no causó revuelo por encontrarse en un territorio religioso, sino por el atuendo que utilizó, el cual, supuestamente, iba en contra del código de vestimenta del Vaticano.
Algunas famosas visitantes de la sede católica, como la reina Isabel, Jacqueline Kennedy, Michelle Obama o Melania Trump han optado por acudir con atuendos oscuros y algunas de ellas incluso llevaban un velo.
Sin embargo, Kardashian llamó la atención de las cámaras porque utilizó un vestido casi transparente entallado de encaje blanco con hombros descubiertos y cortes estratégicos que hacían lucir su abdomen y cadera.
El vestido es una creación del diseñador mexicano Victor Barragán, quien presentó la pieza en su pasarela de otoño 2020, con un corte todavía más atrevido que el de Kardashian en el que mostró los senos de una modelo.
Pero la piel al descubierto no es el motivo por el que el atuendo de Kardashian causó polémica, sino por el significado detrás de la creación de la prenda.
Barragán contó a Vogue que se inspiró en la herencia cultural mexicana para hacer una colección basada en la época de la Inquisición en el país con la persecución de brujas, cuyas creencias fueron consideradas herejes por la Iglesia.
Al mismo tiempo, la colección de otoño es una declaración de empoderamiento dentro del patriarcado, pues, según el diseñador, la sexualidad ahora es un poder equivalente a la brujería en el siglo XVI.
De esta manera, Kim Kardashian desafió los estatus del Vaticano y sociales para utilizar una pieza única con un poderoso mensaje.
No obstante, Kardashian no lució el vestido durante toda su visita en el Vaticano, pues tuvo que cubrirse con un abrigo negro para poder entrar a las instalaciones católicas.
Según las reglas del Vaticano, los visitantes deben evitar elementos en su cuerpo o vestimenta que ofendan la moral católica, la religión y la decencia común, lo cual puede incluir prendas escotadas, sin mangas, bermudas, minifaldas o sombreros.
Kardashian acudió con Kate Moss y su hija a Roma, pero ellas fueron preparadas son atuendos sombríos que no llamaban la atención.
Kim tuvo que cubrirse, pero no sin antes acaparar reflectores y enviar una poderosa declaración de moda con el vestido Barragán. ¿Estás de acuerdo con su elección de vestido o crees que fue demasiado lejos?
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