Arsénico y tóxicos: vinculan beber agua de la llave en California con 15,000 casos de cáncer
Un nuevo estudio reveló que miles de sistemas de agua potable en el estado están contaminados con químicos y otros agentes tóxicos, que a lo largo de los años podría provocar que hasta 15,000 personas desarrollen casos de cáncer.
Investigadores del grupo ambientalista Enviromental Working Group (EWG) analizaron documentos estatales y federales que contenían un listado de los contaminantes tóxicos y agentes cancerígenos detectados entre el 2011 y 2017 en más de 2,700 sistemas municipales de agua potable.
El reporte advierte que los mayores riesgos de desarrollar el padecimiento se registraron en las comunidades pequeñas y medianas, precisamente en donde se necesitan mejoras en la infraestructura de distribución del líquido para asegurar su pureza.
El documento también identificó los cinco principales grupos de contaminantes en el agua potable de California, entre estos arsénico, cromo hexavalente, derivados de desinfectantes, elementos radioactivos como uranio y radio, así como otros componentes orgánicos cancerígenos.
A diferencia de otros estudios, los investigadores del EWG calcularon los riesgos a la salud que podría acarrear el consumo de todos estos elementos tóxicos en su conjunto y no de manera individual, como suelen hacerlo los organismos oficiales que regulan la calidad del agua a nivel local, estatal y federal.
"El agua potable rara vez contiene solo un contaminante, aún así, los reguladores estiman los riesgos a la salud uno por uno. Esto ignora los efectos que múltiples contaminantes pueden tener combinados", explicó Tasha Stoiber, una de las autoras del reporte.
Pese a que el 90% de los sistemas de agua potable en California cumplen con los estándares estatales y federales, los investigadores advierten que, cuando se habla del líquido, lo legal no siempre significa que es seguro. Como ejemplo de esto, el estudio indica que en el 85% de los casos en los que los residentes potencialmente podrían desarrollar cáncer, los contaminantes causantes se encontraban en el agua en niveles por debajo de los permitidos.
De acuerdo con los cálculos científicos, los autores estimaron que en un periodo de vida promedio de 70 años, las cantidades de arsénico encontradas en el agua potable de California podrían causar 7,251 casos de cáncer entre los residentes del estado. El cromo hexavalente sumaría otros 2,448, los derivados de desinfectantes 5,244 y los elementos radioactivos y componentes orgánicos poco más de 500.
En otro desglose realizado en el mismo documento, indican que de las más de 38 millones de personas expuestas a los contaminantes, 4,860 personas podrían desarrollar cáncer bebiendo agua de la llave proveniente de 495 sistemas que distribuyen el líquido a 3.1 millones de californianos, mientras que otros 1,117 sistemas, que brindan servicios a más de 28 millones de residentes, podrían provocar el padecimiento en 10,427 personas.
Los investigadores esperan que, tras la publicación del estudio, el estado pueda adoptar nuevas mediciones de contaminantes en el agua con el objetivo de proteger la salud de los residentes. Mientras eso ocurre, recomiendan utilizar filtros y en la medida de lo posible evitar beber el líquido directamente de la llave.