United Airlines recorta 35 vuelos desde el aeropuerto de Newark y deja las razones bien claras
NUEVA YORK - Con el fin de evitar las largas demoras y cancelaciones que afectaban a pasajeros, United Airlines anunció que recortó 35 vuelos diarios de su programación en el aeropuerto internacional Newark Liberty, en Nueva Jersey.
La decisión, informó este sábado 3 de mayo el director general de United, Scott Kirby, respondió a las repetidas fallas en la tecnología que se utiliza para operar los vuelos en el aeropuerto de Nueva Jersey.
En reportes de la istración Federal de Aviación (FAA, por sus iniciales en inglés), quedó que, este sábado, la falta de personal estaba causando demoras de dos horas en promedio y algunas de hasta cinco horas.
Las salidas se retrasaron 45 minutos en promedio.
Aeropuerto de Newark afecta a otros
Los problemas en el aeropuerto de Nueva Jersey más cercano a la Ciudad de Nueva York se extendieron durante toda la semana pasada.
El 1 de mayo, el aeropuerto internacional Newark Liberty advirtió que problemas de personal así como "obras de construcción" estaban provocando demoras.
Pero esos retrasos y cancelaciones se agravaron, además, cuando más de una quinta parte de los controladores de tráfico de Newark "abandonaron sus puestos de trabajo", declaró el director de United Airlines.
La compañía de seguimiento de vuelos FlightAware evidenció el efecto dominó de las demoras en Newark en los aeropuertos de Los Ángeles, Atlanta, Chicago, Miami y Dallas, entre otras ciudades.
Según información en su sitio web, United Airlines opera desde Newark vuelos a 76 ciudades de Estados Unidos y 81 destinos internacionales.
Recortar 35 vuelos representa aproximadamente 10% del cronograma nacional de ida y vuelta que opera la aerolínea y su red regional United Express, publicó AP.
Turbulencia para las aerolíneas
La decisión de United de reducir su programación de vuelos en Newark se produce en un momento de incertidumbre para las aerolíneas de Estados Unidos.
Y es que los posibles clientes de la industria están reconsiderando volar por trabajo o por vacaciones, ante los efectos de la guerra de aranceles en la economía de Estados Unidos.
En cuanto a la escasez de controladores de tráfico aéreo, el gobierno federal ha estado intentando "impulsar" esa fuerza laboral.
Sean Duffy, secretario de Transporte de Estados Unidos, informó un programa para reclutar nuevos controladores y ofrecer incentivos a los existentes para que no se retiren.
Por su parte, la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo, dijo que esas medidas podrían ayudar, pero el sistema está “muy atrasado en cuanto a actualizaciones tecnológicas y de infraestructura”.
Duffy coincidió, al indicar que visitó a "nuestros trabajadores controladores de tráfico aéreo mientras llevamos a cabo labores para solucionar estas fallas causadas por tecnología obsoleta".
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