La provocadora fiesta “casi nudista” de celebridades rusas que terminó en escándalo, demandas y órdenes de prisión
Una fiesta en Rusia, donde los invitados debían asistir “casi desnudos”, trajo terribles consecuencias para la organizadora y para algunos de los invitados. A pesar de que la vida nocturna de la élite rusa es famosa desde hace mucho tiempo, parece ser que esta peculiar fiesta cruzó una línea invisible y provocó un escándalo público.
La fiesta fue organizada por la presentadora de televisión y actriz Anastasia Ivleeva en un club nocturno de Moscú el pasado 20 de diciembre. Para asistir, los invitados debían ir “casi desnudos”.
El rapero Vacio siguió al pie de la letra las indicaciones y acudió al lugar “vistiendo” un calcetín que cubría estratégicamente sus genitales.
Poco después, empezaron a circular por las redes sociales fotos de la fiesta, antes las imágenes los legisladores conservadores, blogueros y otras personas desataron una tormenta de críticas, afirmando que las fotografías eran indecorosas, incluso antipatrióticas, para un país inmerso en la guerra en contra de Ucrania.
Algunas de las críticas reflejaban el sentimiento ferozmente conservador de Rusia, en medio de las repetidas denuncias del presidente Vladimir Putin contra Occidente por intentar socavar los "valores tradicionales" y el nacionalismo intensificado por la guerra de Rusia en Ucrania.
Maria Butina, una parlamentaria rusa, instó a la policía a investigar si la fiesta casi nudista violaba las leyes rusas que prohíben difundir "propaganda" LGBTQ+, ya que el Tribunal Supremo de Rusia dictaminó en noviembre que el "movimiento" LGBTQ+ constituía extremismo.
Dos días después de la fiesta, Vacio, cuyo nombre legal es Nikolai Vasilyev, fue encarcelado por vandalismo menor y multado con unos 2,000 dólares por violar la ley de propaganda del país.
Una demanda por ir en contra de la moral rusa
Este miércoles los medios de comunicación rusos informaron de que unas 20 personas habían presentado una demanda colectiva de 1,000 millones de rublos, cerca de 11 millones de dólares, contra la organizadora, alegando que habían sufrido daños morales por ver las fotografías de la fiesta.
La demanda pide que el dinero que obtengan por los daños sea abonados a un fondo que apoye a los soldados que luchan en Ucrania. Aún no está claro si logre abrirse el caso, ya que no hay reglas claras al respecto.
"La gente puede reunirse semidesnuda, desnuda o en tangas... (el que sea) socialmente desaprobado no equivale necesariamente a 'ilegal'", declaró la abogada Yulia Fedotova, citada por el portal news.ru.
Una disculpa no aceptada
En medio de las reacciones, la organizadora Anastasia Ivleeva publicó un vídeo de disculpa. "Me gustaría pedirles una segunda oportunidad... Si la respuesta es no, entonces estoy lista para mi ejecución pública", dijo el miércoles.
A raíz de la indignación, varias de las figuras más importantes de la cultura pop rusa han emitido declaraciones públicas pidiendo perdón por asistir a la fiesta.
"Hay momentos en la vida de toda persona en los que entra por la puerta equivocada", dijo Philipp Kirkorov, un cantante conocido por sus brillantes y exagerados disfraces. En una declaración en vídeo, dijo que él y otras celebridades deberían elegir cuidadosamente sus eventos "en este momento difícil, un momento de heroísmo".
Ksenia Sobchak, una socialité y periodista que fue candidata presidencial en 2018, dijo que "si alguien se sintió ofendido por mi apariencia, pido disculpas por ello. Amo a mi país, soy una periodista que trabaja en Rusia".
Las disculpas no han sido bien recibidas por los conservadores rusos que han aumentado desde la operación militar en Ucrania. Hasta hace poco los círculos liberales de la alta sociedad moscovita rara vez se habían visto afectados por el escrutinio de los conservadores.
El cantante Dima Bilan dijo que "entendía el resentimiento de nuestra gente, especialmente de los chicos que nos defienden en primera línea".
El Kremlin se negó a hacer comentarios, pero la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Maria Zakharova, se refirió a la polémica.
"La vida nos enseña lecciones dolorosas", dijo en la radio Sputnik, según la televisión estatal. "Estas personas deben darse cuenta de la profundidad del problema y mejorar. Por su propio bien", añadió.
Mira también: