El 21 de marzo, un acto de vandalismo derribó el monumento de cruces en honor a los 53 inmigrantes muertos en un tráiler en 2022 en San Antonio. El domingo 24, voluntarios restauraron las cruces, reafirmando la memoria y dignidad de las víctimas. A finales de 2023, también fueron quemadas, pero se reconstruyeron. El fiscal Joe Gonzales calificó el vandalismo como crimen de odio. La comunidad sigue comprometida con el monumento, que incluirá bloques de piedra y una placa con los nombres de las víctimas.