5 razones por las que tu hijo te rechaza, pero te sigue amando igual
Algunos bebés y niños en la etapa preescolar comienzan a desarrollar ciertas actitudes que preocupan a padres por todo el mundo, estas pueden generar conflicto pues implican el rechazo del pequeño a mamá o papá.
De acuerdo con la psicóloga de la Universidad de Maryland, Baltimore, Susan Ayers Denham, esto puede ocurrir por distintos factores, pero nunca debes tomarlo como algo personal:
#1 Si se le disciplinó
Los bebés toman tiempo para recuperarse de una carga emocional que implica haber sido disciplinado. De acuerdo con la especialista, para resolverlo debes explicarle que aunque haya roto alguna regla le sigues amando y siempre estarás ahí, luego debes darle su espacio para que pueda relajarse y pensar.
#2 Está en medio de una rabieta
La especialista explica que la vida emocional de un bebé es difícil, ya que ellos no saben cómo explicar sus sentimientos de manera abierta. Puede que el pequeño se sienta solo o busque más atención, por lo que una solución es preguntarle si siente que no pasas suficiente tiempo con él o ella. Tratar de recordar lo que el pequeño hizo durante el día será vital, pues así podrías hacer preguntas sobre lo que le molesta hasta encontrar una respuesta.
Recuerda, la paciencia y ser receptivos siempre son la mejor herramienta con tus hijos.
#3 Puede sentirse enfermo
Si se sacude o busca alejarse con demasiada frecuencia o parece desesperado, la doctora Dunham explica que debes llevarlo con el pediatra pues puede tratarse de alguna alergia o se sienta mal físicamente.
#4 La época del padre favorito
Es algo normal en la vida de todo bebé ya que el tiempo que pasa con cada padre es diferente. De acuerdo con la doctora Dunham, esto puede deberse a cambios de actitud que suceden con los adultos al momento de estar juntos.
#5 Comienza a necesitar independencia
El psicólogo y terapeuta familiar de la Universidad Oakland en Rochester, James Windell, explica que los niños entre 2 a 4 años pasan por cambios que les hacen desear mayor independencia. Esto debido a que han seguido las reglas de todos los adultos que conocen y desean tener más control de sus vidas.
Si tu pequeño te rechaza, explica el especialista, puedes convertir esos momentos de estrés en juego, mantenerte presente y hacerle reír siempre que se pueda, pero nunca lo tomes como un ataque personal de tu bebé.
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