Una gran particularidad del cine de superhéroes —vista también en otros tipos de película, aunque en menor medida— es que la correcta elección de un actor o actriz puede determinar el éxito de una película. En otras palabras: existen artistas que nacieron para interpretar a ciertos personajes; y tenemos muchos ejemplos de esto —tanto en DC como en Marvel.

Todo el mundo está hablando maravillas de Wonder Woman y por muy buenas razones. El primer filme en solitario de Princess Diana es la película dirigida por una mujer que más ha vendido en su primer fin de semana. El filme es verdaderamente inspirador y contiene un mensaje de igualdad y paz muy vigente en nuestro tiempo. La historia está muy bien lograda y se hace fácil y entretenida de ver. Y más importante aún, Wonder Woman es una especie de reivindicación de DC. Luego de varios filmes fallidos, por fin una cinta de DC complace masivamente a los fans y a los críticos.

No es nuevo... ya pasaron casi dos años desde que se anunció que Gal Gadot interpretaría a la Mujer Maravilla en la pantalla grande y el "interné" explotó en indignación.

Estamos bastante acostumbrados a escuchar la noticia de que tal o cual película ha sido parcialmente censurada o totalmente prohibida en un determinado país por razones vinculadas al sexo, las drogas, la violencia y todas esas cuestiones siempre polémicas que despiertan el terror de censores y autoridades.

El Universo cinematográfico de Marvel (MCU por su siglas en inglés), además de ser la franquicia cinematográfica más exitosa de todos los tiempos en términos puramente taquilleros, tiene la particularidad de haber redefinido el panorama cinematográfico en Hollywood, convirtiéndose en el modelo a seguir en el mundo de los blockbusters.

Wonder Man