¿Por qué no es cierto que se estén contando "votos ilegales" como afirma Trump?
Desde la madrugada del 4 de noviembre de 2020, el presidente Donald Trump inició una campaña para denunciar un gran fraude electoral, sin aportar ninguna prueba que lo demuestre.
Al mismo tiempo ha exigido que se detenga inmediatamente el conteo de los votos que los electores enviaron por correo de forma anticipada, especialmente en los estados que hoy están siendo determinantes para elegir al presidente de Estados Unidos: Wisconsin, Pennsylvania, Michigan, Georgia y Carolina del Norte. Sin embargo, no es posible detener un proceso electoral que cumple su curso legal con normalidad y que sigue las reglas de cada estado sobre los tiempos en los que se comienzan a contabilizar sus votos anticipados.
El presidente y candidato republicano penalizado varios tuits, por considerarlos engañosos-, y en el único discurso que ha pronunciado desde el día de las elecciones, en el que se proclamó ganador cuando todavía se esperaban -y se esperan- los resultados. Sus colaboradores y familiares también se han unido al coro que grita fraude.
En sus más recientes declaraciones desde la Casa Blanca, en una comparecencia el 5 de noviembre, el presidente hizo distinciones entre “votos legales” y “votos ilegales”para referirse a los votos por correo y los que se consignaron de manera presencial. “Queremos que cada voto legal se cuente. Quiero apertura y transparencia, no salas secretas de conteo, ni boletas electorales misteriosas, ni votos ilegales que se depositen después del día de la elección. Tienes el día de la elección y las leyes son muy fuertes en eso. Tienes el día de la elección y [las leyes] no quieren que los votos se depositen después del día de la elección (...)”, dijo.
Y continuó: “Queremos una elección honesta, queremos un conteo honesto, queremos gente honesta trabajando allí, porque es un trabajo muy importante. Así que esa es la manera como este país va a ganar. Esa es la manera como Estados Unidos ganará. Y nosotros pensamos que vamos a ganar la elección fácilmente, pensamos que va a ver muchos litigios, porque tenemos muchas evidencias, muchas pruebas, y va a terminar quizás en la Corte más alta de esta tierra, ya lo veremos. Pero pensamos que habrá muchos litigios, porque no podemos permitir que nos roben esta elección así”.
El abogado constitucionalista Angel Leal y analista de elecciones para Univision argumentó que no hay ninguna razón para hablar de fraude.
“En el caso de Pennsylvania, se solicitaron más de un millón de boletas por correo y en el área metropolitana de Filadelfia se solicitaron más de 400,000 boletas por correo. Hay una posibilidad y un tiempo para impugnar esas solicitudes de boletas; es decir, el Partido Republicano tuvo la oportunidad de impugnar esas solicitudes y no lo hizo, cero”, dijo Leal.
“En el condado de Allegheny - agregó -, impugnaron 237 solicitudes de votos por correo de más de 400,000. Es decir, teniendo la oportunidad hasta el viernes pasado - que fue la fecha tope - de hacerlo, no lo hicieron. Entonces se me hace un poco tarde hacer este tipo de alegatos y creo que una corte lo pudiera ver de esa manera también, porque no agotaron sus recursos istrativos”.
Associated Press - que además es de forma oficiosa el medio autorizado para divulgar los resultados electorales en Estados Unidos - reportó que la campaña del mandatario y candidato republicano demandó legalmente los procesos de escrutinio de Michigan, Georgia e impugnó los de Pennsylvania y Nevada. En Wisconsin van a pedir un recuento de los votos. Los abogados de la campaña republicana demandan una interrupción temporal del escrutinio hasta que les den “un significativo” a los centros y les permitan revisar papeletas que ya se abrieron y se contabilizaron.
Hasta el momento del cierre de esta nota, dos juzgados de Georgia y Michigan informó que, sin embargo, este fallo no ha afectado el curso del escrutinio.
El abogado de la campaña de Biden, Bob Bauer, dijo a los reporteros, el 5 de noviembre, que consideraban "sin mérito" las demandas [legales] electorales que ha presentado la campaña de Trump y que esas impugnaciones son "parte de una campaña de desinformación más amplia".
Bauer dijo que las demandas “están destinadas a darle a la campaña de Trump la oportunidad de argumentar que el conteo de votos debería detenerse” y que el equipo del presidente está tratando de “enviar mensajes falsos sobre lo que está sucediendo en el proceso electoral”.
Sí está permitido el conteo de votos que llegan después del día de la elección
El presidente Trump insiste en comunicar -aunque es falso- que no se pueden contar votos por correo que se reciban después del 3 de noviembre. Ya lo había difundido en su cuenta de Twitter, el mismo día de sus declaraciones, y en mayúsculas: “¡CUALQUIER VOTO QUE LLEGUE DESPUÉS DE LA ELECCIÓN NO SE CONTARÁ!”
La red social volvió a calificar este mensaje como engañoso: fue la sexta vez desde que el presidente comenzó a emitir tuits pasada la medianoche del 4 de noviembre.
Pero 22 estados de Estados Unidos que han recibido votos anticipados y por correo después del 3 de noviembre sí tienen amparo legal para hacerlo y escrutar las papeletas, siempre que esas boletas electorales tengan el sello postal con fecha de ese día o del 2 de noviembre.
Hace falta hacer la distinción: una cosa es el conteo de votos después de la elección y la otra, la fecha límite para la recepción de las papeletas y su posterior conteo, que es a lo que el presidente Trump se está refiriendo en estos mensajes con contenido falso.
En medio de las circunstancias que originó la pandemia del coronavirus, 21 estados y el Distrito de Columbia extendieron de forma temporal los plazos para recibir boletas por correo o de voto en ausencia, hasta varios días después del día de las elecciones, siempre que tengan el sello, como mencionamos.
Lo podemos comprobar comparando dos bases de datos confiables, las del sitio web de análisis electoral una versión traducida de una verificación de Lead Stories.
En la mayoría de los estados que ampliaron sus plazos de recepción de votos por correo ya están declarados los ganadores entre los dos candidatos a la presidencia. Pero todavía, al momento de escribir esta nota, hay cuatro estados con el escrutinio sin finalizar: Georgia, Nevada, Carolina del Norte y Pennsylvania. Algunos de ellos son clave para definir quién ocupará la Casa Blanca en el periodo 2021-2025. Tres de estos estados permiten la recepción de papeletas por correo o de voto en ausencia días más tarde del 3 de noviembre, siempre que las papeletas estén selladas con fecha de ese mismo día: Nevada hasta siete días después, el 10 de noviembre; Pennsylvania, hasta tres días después, el 6 de noviembre; y Carolina del Norte, hasta nueve días después, el 12 de noviembre.
(En otros de los estados que tomaron estas medidas temporales, el plazo se alarga hasta 14 y 17 días, como Illinois, California y Utah. Otros como Nueva Jersey y Nueva York – cada uno puede recibir votos por correo hasta siete días después del 3 de noviembre - permiten, además, la llegada de papeletas sin matasellos o con sellos defectuosos hasta dos días después de la elección o el mismo día).
Trump se ha había pedido agilizar esa petición, pero la Corte Suprema del país lo negó por la vía rápida, lo cual, por otra parte, abre la posibilidad de que se produzcan más impugnaciones después de la jornada electoral.
Justamente el director suplente de la campaña de Trump, Justin Clark, confirmó a Associated Press que buscarán "intervenir" en ese fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos.
Con Carolina del Norte ocurrió un cruce de litigios similar al de Pennsylvania.
Según una nota de The Washington Post -- que reporta que el Servicio Postal de Estados Unidos procesó con retraso unas 150,000 boletas electorales -, en Arizona y en Georgia, 864 y 853 papeletas por correo que iban tarde quedaron invalidadas, porque estos dos estados no permiten la recepción de votos después del 3 de noviembre. Pero a Nevada sí llegaron 4,518 boletas electorales después del día de la elección, a Carolina del Norte, 1,958 y a Pennsylvania, 3,439. Porque estos tres estados clave, que ahora están tan disputados, sí permiten por ley la recepción de los votos por correo días más tarde, como detallamos.
¿Por qué el escrutinio puede ser más lento?
Unas horas después de las declaraciones de Trump en la Casa Blanca, Ben Hovland, comisionado de la Comisión de Asistencia de Elecciones de Estados Unidos (EAC en inglés) escribió en su cuenta de Twitter una defensa de la integridad de los es de las elecciones del país, con quienes ha trabajado, dijo, a lo largo de su carrera.
“Son demócratas, republicanos e independientes. Son servidores públicos dedicados que conducen nuestras elecciones con una devoción extrema por su responsabilidad de hacerlo bien. Están entre los mejores estadounidenses que conozco. Nadie debería desprestigiar su integridad con acusaciones sin fundamento para su propio beneficio político. Procesar boletas electorales toma tiempo, porque están activas medidas de seguridad para proteger la integridad de la elección”.
Las palabras de Hovland son relevantes porque a él, como a los otros comisionados de la EAC, lo nombró en su cargo el presidente de Estados Unidos, y, además, lo ratificó el Senado.
La EAC es una comisión bipartidista e independiente que se rige por la Ley Help America Vote de 2002 y “funciona como un centro nacional de intercambio de información sobre la istración de las elecciones”, además de “adoptar directrices para el sistema de votación voluntaria”, describe en su página web.
La Agencia de Ciberseguridad y de Seguridad de las Infraestructuras, también del gobierno, respalda la explicación de la dilatación en el procesamiento y el conteo de las boletas electorales por correo: “El procesamiento y tabulación de las boletas electorales por correo que entran toma más tiempo que el procesamiento [de los votos] en persona, lo que causa que la tabulación de los resultados ocurran más lentamente, y que eso resulte en más boletas electorales para contabilizar la noche de la elección”.
Pero, además, en estas elecciones hubo números gigantes de votos anticipados y por correo. Según el U.S. Election Project, del profesor Michael McDonald, profesor de la Universidad de Florida –un sitio que se convirtió en referencia para el seguimiento del voto anticipado durante esta campaña--, 101,314,830 personas votaron de forma anticipada. De ellos, 65,379,247 lo hicieron por correo.
Y están los aplazamientos de las fechas de recepción de las boletas electorales por correo que explicamos más arriba.
El proceso es lento. Y precisamente la EAC dice, en sus explicaciones sobre los lineamientos para votar por correo, que las bases para la preparación, recepción, tabulación y seguridad de las boletas electorales son las mismas en todos los estados, pero que en cada uno varían “las leyes, normas y regulaciones que controlan cuáles votantes pueden solicitar una papeleta por correo o procedimientos específicos que deben seguirse para solicitar una boleta electoral por correo". "Las normas para cuándo se deben recibir las solicitudes de boletas electorales, cuándo se envían por correo esas papeletas a los votantes, y cuándo esas papeletas se regresan [con el voto] al funcionario electoral todas difieren según las leyes estatales”, añade.
Eso es lo que está rigiendo durante este conteo. El proceso toma tiempo.
En efecto, la mañana del 6 de noviembre, Brad Raffensperger, el secretario de Estado de Georgia, dijo que en ese estado harán un recuento de votos, debido al estrecho margen entre los candidatos presidenciales.
“En estos momentos el margen es muy estrecho para declarar un ganador [ too close to call]”, dijo Raffensperger, quien es republicano. “Habrá un recuento”.
Bajo las leyes electorales de Georgia, los candidatos pueden pedir un recuento si el margen de diferencia es menos de un 0.5%. Para el momento en que el secretario lo anunció, Biden lideraba a Trump por unos 1,600 votos.
"Estamos mirando un margen que es menor que la cantidad de estudiantes en una escuela secundaria grande”, dijo Gabriel Sterling, director de implementación del sistema de votación en Georgia, según reportó USA Today. Sterling dijo que aún quedan 4,169 votos por contar a nivel estatal y que un recuento de los votos se podría extender hasta el final de noviembre.
El voto por correo es seguro
El voto por correo es seguro y las probabilidades de fraude son ínfimas. Como El Detector, un análisis de The Washington Post del voto por correo en tres estados, con la colaboración del Centro de Información de Registro Electrónico (ERIC [por sus siglas en inglés]), reveló que, en las elecciones generales de 2016 y 2018, los funcionarios identificaron solo 372 posibles casos de doble votación o votación en nombre de personas fallecidas de los aproximadamente 14.6 millones de votos emitidos por correo, lo cual representa el 0.0025%.
Y el 26 de agosto de este año, Christopher A. Wray, director del FBI, aseguró en una conferencia de prensa sobre seguridad electoral que no habían encontrado evidencia de fraude coordinado con votos por correo. También destacó lo improbable que sería.
Te contamos el resto de lo que dijo el director del FBI y otros argumentos sobre la improbabilida de un fraude electoral en esta verificación:
Esta verificación de datos forma parte del convenio FactChat, coordinado por la International Fact-Checking Network (IFCN) con el apoyo de WhatsApp. El objetivo del proyecto es llevar mejor información en español durante las elecciones presidenciales de los EEUU en 2020. Este y otros chequeos políticos los puedes recibir directo por WhatsApp haciendo click aquí o registrando el número +1 727-477-2212 y escribir "Hola". Te esperamos.
¿Viste algún error o imprecisión? Ayúdanos a corregirlo. También queremos leer si tienes una propuesta de verificación del discurso político o imágenes: [email protected]
Aquí te contamos sobre nuestra metodología y política de corrección.
#chatbot