«¡Ay, qué dolor! Ya no aguanto estas varillas». «¿Otra vez relleno? Al parecer necesitamos un poco de push up». «–Mmmm… encaje. Nos sentimos muy sensuales con él». «Uy, qué alivio. Estamos en casa, ya puedes desabrocharnos». ¿Se imaginan que el busto hablara? Si lo hiciera, sin duda diría algunas de estas expresiones a causa del bra.