Encontraron el lugar más limpio de la Tierra, ¿todavía hay esperanza para salvar el planeta?
La contaminación es un problema ambiental global, pero un grupo de científicos encontró el lugar más limpio de la Tierra.
La polución en el planeta es causada principalmente por la actividad humana, los desechos industriales y algunos procesos orgánicos.
La contaminación es en gran parte responsable del calentamiento global y el eventual deterioro del planeta; sin embargo, hay algunos rincones del planeta que todavía tienen aire limpio.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Colorado y la Agencia Australiana de Meteorología identificó una región en el océano de la Antártida como el lugar con el aire más limpio del planeta.
Los científicos estudiaron las partículas del límite de la capa marina y el límite de la atmósfera en la región oceánica para rastrear su origen.
La investigación arrojó que los microorganismo presentes en la atmósfera de la Antártida provienen directamente del océano y no hubo rastros de gases generados por la actividad humana.
La región del océano Austral que fue estudiada se encuentra a 40 grados de latitud sur del planeta y la composición de las muestras bacterianas determinó que la contaminación humana no viaja hacia esa parte del mundo.
De acuerdo con Tomas Hill, coautor de la investigación, es uno de los pocos lugares de la Tierra que no se ha visto afectado por las actividades antropogénicas (es decir, creadas por el hombre).
En los océanos del centro y norte de la Tierra, las partículas de viento provienen principalmente de los continentes cercanos, lo cual indica una influencia directa de los humanos.
En el estudio de las partículas de aire de la Antártida, los rastros de ADN contaminante eran casi imperceptibles.
En otras partes del mundo, el crecimiento de las plantas también influye directamente en la contaminación atmosférica, pues aumenta la precipitación, la luz solar y altera el equilibro de radiaciones en la Tierra.
En el caso del océano Austral, como la partículas provienen principalmente del océano, la formación de nubes es diferente y las partículas de hielo en el agua de mar son las más bajas jamás registradas.
De acuerdo con los investigadores, utilizaron técnicas muy cuidadosas para no alterar el ecosistema, no dejar rastro humano en la atmósfera y mantener limpio el aire de la Antártida.
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