En la ciudad, varios locales comerciales continúan abiertos, pues por el momento no se sienten los efectos de la tormenta tropical Eta en esta zona de Florida. Sin embargo, los dueños de algunos negocios ya tomaron precauciones, no están prestando servicio al público y han puesto bolsas de arena en las puertas para evitar que, si se registran emergencias, sus propiedades se inunden.