Si bien las vacaciones son sinónimo de relajación, como tantas otras actividades gratificantes, pueden convertirse en estresantes. El punto está en cómo tomemos las cosas, organizar un día de campo, limpiar la casa o lavar la ropa también puede serlo. En este caso pensar en vacaciones sí es positivo, pero muchas veces tenemos en mente un presupuesto que las tarifas no nos acompañan.