Un problema técnico obligó a Blue Origin, la compañía aeroespacial con la que Jeff Bezos busca competir con SpaceX de Elon Musk, a suspender el lanzamiento de su nuevo cohete, el gigantesco New Glenn, de más de 320 pies de altura. La misión ya había sido reprogramada para este lunes desde una de las plataformas del Centro de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida.