Cada planeta del sistema solar tiene un atardecer único: los compartió la NASA
Así como la llegada de luz solar a la Tierra depende de la posición geográfica y los cambios de estación, lo mismo ocurre en otros planetas y los atardeceres lucen espectaculares.
Todos los planetas tienen características y comportamientos distintos, por lo que resulta imposible compararlos con la Tierra; sin embargo, tienen en común que son iluminados por el Sol.
Gracias al Sol, los planetas mantienen un orden, una órbita y le dan armonía al sistema solar, a pesar de ser tan diferentes entre sí.
Incluso con la luz del Sol en común, la manera en que se manifiesta en todos los planetas es diferente. Mientras que en algunos cuerpos podría lucir naranja, en otros se podría ver azul o verde.
La llegada de luz a un planeta no solo depende de la distancia al Sol, sino de las radiaciones electromagnéticas, que incluyen ultravioleta, infrarrojo o la luz detectable por el ojo humano.
Otro factor importante son los gases que componen la atmósfera, pues son responsables de bloquear o permitir la entrada de distintas ondas.
Como parte de una investigación para una misión a Urano, un científico de la NASA creó un modelo de simulación que muestra cómo lucen los atardeceres en diferentes planetas.
Las simulaciones forman parte del Generador de Espectros Planetarios, un sistema que ayuda a los científicos a conocer las condiciones atmosféricas de cada planeta y su interacción con el exterior.
De acuerdo con la simulación, los atardeceres de los planetas no son iguales a los de la Tierra. Ni siquiera los de este planeta son iguales, pues las estaciones o las condiciones climáticas modifican cómo se ven las puestas del Sol.
El modelo indica que la luz en Venus, Marte y Urano dura menos que en un día normal en la Tierra. Asimismo, la luz en el horizonte no luce de la misma forma que la llamada ‘hora dorada’ de la Tierra.
En Marte, la luz llega con un espectro tipo viñeta rojiza que desaparece conforme anochece; en Venus, el atardecer luce con un tono amarillento; y en Urano, el cielo se ve más azul que en la Tierra, casi con tonos verdes.
Marte tiene altas concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera que, combinadas con las partículas de polvo del planeta, le dan tonalidades rojas al atardecer.
El caso de Urano depende del hidrógeno, helio y metano de la atmósfera, gases responsables de dispersar la luz en ondas cortas y volverla azul.
Los resultados de la simulación servirán para enviar una sonda a las zonas iluminadas del planeta helado y estudiar su composición química.
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