El Departamento de Agricultura y la división que controla los alimentos y bebidas aseguran que en el mercado existen al menos 12 millones de libras de carne no aptas para el consumo. La carne en cuestión fue producida y empacada entre el 26 de julio y el 7 de septiembre, distribuida en todo el país e incluye marcas como Kroger, Cedar River Farms, Grass Run Farms y JBS.