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Ciencia y Tecnología

Encontraron el fósil de un vampiro en Argentina y los arqueólogos están fascinados: fotos

Publicado 30 Jul 2021 – 02:17 PM EDT | Actualizado 2 Ago 2021 – 06:52 PM EDT
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Hace miles de años, muchas de las especies más grandes habitaron en lo que ahora es Argentina. Una prueba de esto es que los arqueólogos del Museo de Miramar hallaron la rama mandibular de un enorme vampiro, en el interior de lo que solía ser una madriguera de perezosos gigantes.

El fósil tiene unos 100 mil años de antigüedad y pertenece a una variante del murciélago actual, la cual solía alimentarse de sangre (característica que lo convierte en un mamífero hematófago).

El animal fue identificado como un miembro de la especie Desmodus draculae, un nombre que la comunidad científica eligió basándose en las leyendas del conde Drácula y los vampiros en Transilvania.

El ejemplar medía alrededor de medio metro con las alas estiradas y pesaba unos 60 gramos. Su descendiente actual, el vampiro o murciélago común, pesa entre 10 o 20 gramos.

Para saciar su sed de sangre, el Desmodus draculae tenía como víctimas favoritas a los mamíferos más grandes de su época: perezosos gigantes (de unos 4.5 metros de altura), elefantes sudamericanos y los famosos tigres dientes de sable.

Por este motivo, hay expertos que señalan que su gran tamaño se trató de una adaptación evolutiva debido a las presas de las que se alimentaba.

Los fósiles del Desmondus draculae se han encontrado a lo largo de todo el continente americano: desde México hasta Argentina. Es por ello que los científicos investigan activamente a los ancestros de los murciélagos modernos.

Como ejemplo de ello, en el año 2000 los paleontólogos Ulysses Pardiñas y Eduardo Tonni publicaron un ensayo en el que sugieren que estas gigantescas criaturas redujeron su tamaño debido al calentamiento global.

La idea surgió a partir del análisis un colmillo, el cual tiene 300 años de antigüedad y fue localizado a unos 600 kilómetros del hábitat actual del vampiro común en Centinela del Mar, Argentina.

Según su hipótesis, los animales migraron para alejarse del calor, pues durante el Pleistoceno el clima en la región aumentó 2° C.

Las modificaciones evolutivas aparecieron para que el murciélago no sufriera golpes de calor durante sus vuelos o actividades (como la caza). La extinción de sus principales presas también propició la reducción de su tamaño.

Curiosamente, el vampiro gigante no fue el único que evolucionó debido a cuestiones climáticas: durante el Pleistoceno y Holoceno aumentaron y diversificaron las especies de mamíferos pequeños.

Actualmente solo existen 3 especies de murciélagos que beben sangre:

  • Vampiro común (desmodus rotundus)
  • Vampiro de alas blancas (diaemus youngi)
  • Vampiro de patas peludas (diphylla ecaudata)

En general se alimentan de los animales y es poco común que lo hagan de humanos, sin embargo, cuando sucede el peligro radica en que contagien a su víctima de rabia u otras infecciones.

¿Te imaginas a un murciélago chupasangre de medio metro de largo? Cuéntanos en los comentarios tu opinión al respecto.

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