Milton y Helene mostraron lo peor del cambio climático: te explicamos los factores más letales de estos huracanes
Es posible que en los próximos años sigamos viendo huracanes tan intensos y devastadores como Helene o Milton. Como ellos, es posible que el daño que dejen los que vienen no sólo se vea en las comunidades de la costa, sino también en las que están tierra adentro.
Un estudio publicado recientemente por la red de científicos World Weather Attribution (WWA) aseguró que como consecuencia del cambio climático y el uso de combustibles fósiles, huracanes como Helene o Milton son 2.5 veces más propensos a ocurrir en la región.
Helene tocó tierra en la costa del Big Bend de Florida como un huracán de categoría 4 el 26 de septiembre pasado. Desde allí marcó una ruta de devastación en Georgia, Tennessee y en las Carolinas. Dejó 166 muertos y unos 600 desaparecidos.
El Servicio Nacional de Huracanes (NWS) asegura que el sur de los Apalaches fue una de las zonas más impactadas por las "inundaciones sin precedentes". Pero los daños no se quedaron ahí: una enorme marejada ciclónica en la bahía de Tampa elevó el nivel del agua hasta los áticos de algunas casas; Atlanta recibió más de 11 pulgadas de lluvia, una cantidad histórica, superior a cualquier otro periodo analizado de 48 horas; y en Carolina del Sur los vientos derrumbaron tantos árboles que 40% del estado quedó sin luz por unas horas.
Dos semanas después llegó Milton. Con las imágenes frescas en la cabeza y con zonas todavía recuperándose de Helene muchos evacuaron. Milton se formó en el golfo de México y apenas en dos días se convirtió en un huracán de la mayor categoría. Este miércoles por la noche tocó tierra en un punto cercano a Siesta Key —a pocas millas de donde impactó Helene— como un huracán de categoría 3.
Pero incluso antes de tocar tierra, Florida vivió al menos 19 tornados que arrasaron con comunidades enteras tierra adentro.
Lluvias y vientos más intensos en el futuro
La red de expertos de WWA aseguró que las lluvias y vientos de ambos huracanes fueron más fuertes que los del pasado. La WWA analiza permanentemente la relación entre los fenómenos meteorológicos y el cambio climático. Sus científicos están en Estados Unidos, Reino Unido, Suecia y los Países Bajos.
"En la región costera, lluvias como esas ahora ocurren casi cada siete años, comparadas con la estimación anterior de 10 años, y son 10% más intensas", se lee en el reporte 'El cambio climático como el principal factor del catastrófico impacto del huracán Helene'. Tierra adentro, las lluvias que causó Helene también fueron 10% más intensas. Calculan que, además, la frecuencia de fenómenos como este se redujo de cada 116 años a cada 70 años.
Friederike Otto, responsable de la red WWA, dijo a la agencia AFP que aunque el porcentaje de 10% pueda parecer bajo, "un pequeño cambio en términos de peligrosidad puede suponer realmente un gran cambio en términos de impacto y daños".
El daño sostenido que Helene siguió causando incluso una vez en tierra se debe a lo potente que era el huracán. La meteoróloga de Climate Central, Bernadette Woods Placky, explicó a la agencia AFP que esa potencia generó que a Helene le tomara tiempo para perder su fuerza a medida que avanzaba: "Se movía rápido (...) por lo que pudo adentrarse rápidamente".
En el caso de Helene, la NASA en un análisis reciente asegura que aun cuando el ojo de este huracán estaba en el golfo de México, por su potencia ya causaba estragos en tierra.
En el caso del huracán Milton, que ha dejado al menos 16 muertos en Florida, las lluvias de un día de duración fueron entre 20% y 30% más intensas debido al cambio climático, y los vientos 10% más fuertes, afirmó este viernes una red de expertos. Afirman que bajo el clima actual —con 1.3 grados centígrados más de calor en relación con la era preindustrial— también existe el doble de probabilidades de que se repitan más huracanes con las características de Milton en siguientes temporadas.
Este aumento de la fuerza del viento vinculado al calentamiento global, dice la red, causó que Milton tocara tierra en Florida como huracán de categoría 3.
"Todos los aspectos de este fenómeno se han visto amplificados por el cambio climático en diversos grados", dijo en rueda de prensa Ben Clarke, uno de los coautores del estudio por el Imperial College de Londres. "Y veremos más de lo mismo a medida que el planeta siga calentándose".