Joven pierde un brazo tras ser atacada en casa por su propia mascota
PHOENIX, Arizona. - Dramática situación la que vivió una joven del valle luego de que perdiera un brazo tras ser atacada por su propia mascota cuando intentaba tranquilizarla.
Luego de múltiples cirugías a las que se tuvo que someter, ahora decide compartir su testimonio buscando no solamente motivar a otros que hayan sufrido incidentes similares, sino también buscando defender a los animales que son víctimas de crueldad animal.
“To say I’ve wanted to give up has never occurred in my mind, but the question still rings in my head: What is the reason for me to survive? In a positive way. Maybe I paid the price without knowing the value yet”, dijo la víctima Kalista Muñoz.
Lejos de darse por vencida o deprimirse, Kalista Muñoz se mantiene con la frente en alto; agradecida por seguir con vida, comparte su testimonio buscando motivar a otros que hayan sufrido lesiones similares.
“Estoy pagando el precio sin conocer aún la recompensa”, dice optimista, aunque no hace mucho se viera obligada a someterse a 18 cirugías para despertar de un coma que atentaba contra su vida.
“He ran straight to him. There was no fight, no nothing. My dogs were downstairs hanging out and he came down in a frantic. And he pinned him to the wall. He didn’t do anything to him, but by the time I came downstairs… he had taken off his cone”.
Era el 1 de julio del 2023 cuando Kalista intentaba detener a su mascota “Zona”; su perro de raza Bull Terrier habría bajado las escaleras- angustiado- mostraba intenciones de agredir a otro cachorro.
Zona terminó mordiendo a la joven de 25 años; durante 30 minutos, Kalista luchaba por tranquilizarlo, pero Zona le arrancaba su brazo dentro del baño de su vivienda. Fue su vecino quien la escuchó y acudió a socorrerla.
No culpa al perro por el ataque
“My right elbow was pretty much gone. Because at the hospital I still had my arm, and they had to do multiple surgeries to try to get a vein from my leg. But unfortunately, it grew an infection, so it wasn’t able to be saved”.
Médicos consideraron injertarle una vena de su pierna en su brazo desgarrado. Lamentablemente, tuvieron que amputarle su brazo derecho por una infección que había desarrollado.
“He was reaching over three months and that was about the time territorial purposes come along and he wasn’t the only male. Unfortunately, because what was imprinted in him before I got him, there was no coming back from that unless he was the only attention”, explicó la víctima
No culpa a la mascota, sino todo lo contrario: dice que al animal le faltaba tiempo para adaptarse al hogar y dicha situación, se desató por cuestiones territoriales. A Zona lo habría recogido de la calle hace tres meses y supone que aquella agresividad surgió por maltrato que supuestamente sufrió en el pasado.
Apenas la semana pasada, la fiscalía del condado Maricopa presentaba la propuesta de ley SB1047, medida que, de ser aprobada, estaría intensificando las sanciones precisamente por crueldad animal y a su vez mejorando las probabilidades de una orden de cateo.
“Y es muy importante porque es una aclaración de lo que es agua, comida, y albergue. Esto ayuda a nuestros fiscales a llevar estos casos a un juicio”, señaló la portavoz de la fiscalía, Karla Navarrete.
A Zona lo tuvieron que sacrificar. Por su parte, Kalista pronto estará recibiéndose de la Universidad Estatal de Arizona con una maestría en trabajo y justicia social para ayudar a otros a sobrellevar traumas o estrés emocional.
Si usted requiere de asistencia, recuerde que puede recurrir al centro de recuperación del estado llamando al (602) 661-0200. Si desea ayudar a Kalista con los gastos médicos, visite este enlace que estableció para recaudar fondos.
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