'Lake Burrito', propiedad de tres hermanos mexicanos, cerró durante un mes debido a la pandemia y al reabrir los clientes no llegaban, por lo que el negocio estaba al borde de la quiebra. Pensaron en cerrar y despedir a los empleados, cuando de repente empezaron a recibir gran cantidad de órdenes, pues el dueño de otro restaurante subió un video a redes sociales pidiendo a sus clientes que apoyaran la competencia. Rápidamente otros locales comerciales se unieron a la iniciativa.