Miles de feligreses desafiaron el frío en la Plaza de San Pedro y, en medio de la ansiedad y expectativa, esperaron por más de tres horas la primera fumata del cónclave. Pese a que el humo negro anunció que ninguno de los cardenales obtuvo los votos necesarios para convertirse en papa, el ambiente de devoción sigue presente entre los devotos. Te puede interesar: Primera fumata marca récord de espera: fue tres horas y 14 minutos después de iniciar el cónclave.