El Síndrome del príncipe destronado
El nacimiento de un nuevo miembro en la familia puede desencadenar en tu hijo sentimientos adversos hacia su nuevo hermanito e incluso hacia vosotros, como padres. Puede mostrarse retraído, desinteresado, con conductas regresivas, pero sobre todo, mostrará celos y envidia.
Todo ello se deberá a que verá amenazada la atención de sus padres,vosotros, que como pequeño de la casa, era exclusivamente para él. Aunque la intensidad del síndrome del príncipe destronado puede variar dependiendo de varios factores, como la edad del niño, si tiene o no tiene hermanos, la atención de los padres, entre otros.
Llega un hermanito: una nueva etapa comienza
La llegada del bebé a casa requerirá de forma inevitable cambios en el hogar. Se deberán hacer ajustes para poder equilibrar la vida junto con el bebé, modificando horarios y con la colaboración de toda la familia. Tu hijo necesitará de vuestro apoyo, ayuda y comprensión para poder entender y adaptarse a los cambios que genera tener un hermanito.
Como padres deberéis hacerle entender que no será reemplazado jamás porque son dos personas totalmente diferente y ambos les queréis igual.
Signos del síndrome del príncipe destronado
Fíjate si tu hijo presenta algunos de estos signos. Si es así puede que esté pasando por la fase de este síndrome:
- Manifiesta que quiere volver a ser más pequeño, porque piensa que de ese modo recibirá la misma atención que el bebé.
- Compara y envidia de forma constante el cariño que le mostráis como padres al bebé con el cariño que le demostráis a él.
- Puede tratar a veces a su hermanito con indiferencia y desinterés, incluso llegando a ignorar la existencia del bebé a causa de los celos y la envidia que siente.
- Baja su rendimiento escolar y se muestra desobediente para llamar la atención.
- Muestra a veces conductas agresivas únicamente con el fin de llamar la atención y que le dediquen tiempo.
Nuevo rol, el hermano mayor
Para tu hijo, la llegada de su hermanito puede provocarle también algo de ansiedad puesto que cambia el rol de ser el pequeño a ser el hermano mayor. Le debéis ayudar a identificar qué es este rol y que es importante para la unión familiar. Aunque si veis que no está preparado no le forcéis, si necesita seguir siendo niño, porque lo es, nadie debe impedírselo obligándole a madurar antes de tiempo.
Necesitará un tiempo para acostumbrarse, igual que cualquier persona ante situaciones nuevas, ya verás que poco a poco y con paciencia y tiempo, será un buen hermano mayor.