Beth tuvo un padre que siempre la apoyó: ¿te diste cuenta del mensaje de 'Gambito de Dama'?
Los padres de Beth en Gambito de Dama fueron terribles personas con la protagonista y dejaron una importante lección sobre las figuras paternas en la serie.
Beth Harmon, la protagonista de Gambito de Dama interpretada por Anya Taylor-Joy, tuvo una infancia complicada con el suicidio de su madre, su llegada al orfanato y su nueva vida con sus padres adoptivos.
La serie revela a través de escenas retrospectivas que el padre biológico de Beth renunció a su responsabilidad familiar tras el nacimiento de su hija.
Paul Harmon las abandonó para formar una nueva familia mientras Beth y Alice vivían en un remolque.
A pesar de las carencias de su hija y exesposa, Paul se niega a reconocer a Beth como su responsabilidad y esto lleva a Alice a cometer el accidente suicida en el auto con la niña dentro.
Dado que su padre renunció a la paternidad, Beth queda a cargo de un orfanato donde aprende a jugar ajedrez gracias al señor Shaibel.
Eventualmente, Beth es adoptada por los Wheatley, pero su destino familiar no es muy diferente a lo que vivió con sus padres biológicos.
Allston, su padre adoptivo, confiesa que nunca quiso adoptarla y también abandonó a su familia después de destruir la vida de su esposa Alma.
Contrario al caso de su madre biológica, Alma se redescubre a sí misma, trabaja para mejorar y darle una mejor vida a su hija adoptiva. Sin embargo, Alma muere y Allston se deslinda de toda responsabilidad hacia su difunta esposa y su hija adoptiva.
La historia repetida de sus padres ocasiona que Beth se convierta en una persona emocionalmente hermética que no se permite amar ni ser amada.
La protagonista se aísla de otras personas y, a pesar del éxito en el ajedrez. No permite la ayuda de nadie en su vida, pues desde niña aprendió que era mejor estar sola.
No obstante, Beth aprende que solo llegará lejos permitiendo la ayuda de externos y dejándose amar por quienes la rodean.
Es en el último episodio de la serie cuando se revela que, a pesar de los conflictos familiares, Beth en realidad nunca estuvo sola y tuvo apoyo un apoyo incondicional invisible.
Beth visita el sótano del señor Shaibel y descubre que, aunque estuvieron distanciados, el conserje del orfanato siguió su carrera en el ajedrez y tuvo un amor incondicional por ella.
Años atrás, Beth le escribió para pedirle dinero prestado para poder ingresar a un torneo de ajedrez y él se lo envió sin cuestionarla.
La ajedrecista gana el torneo y es entonces cuando despega su carrera profesional en el juego de mesa.
Después de enviarle el dinero, no se revela si el señor Shaibel pensaba en Beth o estaba al tanto de su éxito; sin embargo, al final nos damos cuenta que siguió sus pasos de cerca y que le tenía el aprecio que ninguno de sus padres le tuvo.
Al descubrir los recortes de periódicos en el sótano, Beth notó que Shaibel fue la única figura paterna y de apoyo que tuvo, que había quiénes la querían aunque ella no se diera cuenta.
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